Miraba la biblioteca que está hecha un caos a raíz de la mudanza de casi un año y meses. Dejaron los libros en cajas de cajas. Cuando pusieron la biblioteca me dio un ataque de furor y desempaqué los libros y los iba poniendo en las estanterías. Sin orden, quería tener los libros fuera de las cajas, era casi una obsesión y mi arrebato librero desembocó en el actual caos que anda envuelta la biblioteca. Es un caos que yo mismo entiendo, y a veces, confieso que me pierdo también en su laberinto. Cuando estaba en el hospital daba instrucciones a F para que me enviara unos libros y era para ella toda una odisea encontrarlos por más pistas que le daba. No es fácil encontrar un orden en la biblioteca, si me sirve de consuelo. Lo leí en un gozoso libro de Jesús Marchamalo “Tocar los libros” ¿Los ordeno por el nombre de los autores?, ¿por materia?, ¿por el gusto que me han producido a leer los libros?, ¿Vargas Llosa sería un autor amazónico, arequipeño?, ¿cuál es el criterio? No hay un solo y cada viajero hace su propio mapa. Miro la biblioteca y cada autor me da una pista en ese caos. Los que hacían la mudanza y los que rehabilitaban la casa decían que lo que más hay aquí son libros en un tono casi molesto, es el corazón de la casa. F aceptó esa colonización de gota a gota de libros que entran y que les cuesta salir de la casa. A raíz de la cantidad de libros en el texto de Marchamalo hay un dato que me dejó anonadado, la humanidad produce al mes la cantidad de 86, 000 libros. Es decir, cada medio minuto se edita un libro. Un lector medio lee en su vida lo que el mercado laboral produce en ocho horas, dice Marchamalo. Mientras dormimos se han editado libros imposibles de leer. Con el dato hice una rápida encuesta por el watsap entre amigos y conocidos, los amigos me contestaron, los conocidos ni siquiera dijeron algo, seguramente sus nobles tareas cotidianas fueron una cortapisa. Pero los y las patas se quedaban perplejos por la cantidad de libros producidos y por la improbable tarea de leerlos. Eso hace que uno quiera más a su biblioteca donde están los mejores.