Las frases mágicas
Moisés Panduro Coral
¡Cómo ha cambiado el mundo!. En la enseñanza paterna de mi generación, las palabras mágicas tenían ese saborcito de espontaneidad y de veracidad que ahora se extrañan mucho en las relaciones humanas. Para pedir una información, requerir una ayuda, exhortar a alguien, y en general, para solicitar un servicio, se anteponía o se agregaba el “por favor”. Sonaba agradable, pero además era auténtico. Igualmente, para expresar gratitud por una atención, reconocimiento por una gentileza o complacencia por un servicio, la palabra “gracias” se escuchaba gratificante para la persona a quien iba dirigida el agradecimiento.
Y así, podríamos citar otras expresiones: “en qué la puedo servir, señora” o “qué puedo hacer por usted, señor”, denotaban esa vocación solidaria, de ayuda al prójimo, de interés por los demás, de sentido desinteresado de una acción, un gesto humano natural que contribuía grandemente a la convivencia social. Y el “te amo” de los románticos era el bálsamo que curaba heridas y que atraía los espíritus hacia el bienestar común, ponía la mirada hacia adelante y desataba las fuerzas del alma para superar el momento difícil.
Qué es lo que tenemos ahora. Tenemos que el “por favor” ha sido reemplazado por la exigencia insípida, la falta de respeto, la orden que proviene de algún reglamento cuadriculado o por la falta de buenos modales; la palabra “gracias” ha desaparecido del vocabulario de una descomunal mayoría cada vez más materialista; mientras que el “qué puedo hacer por usted” ha sido reemplazado por un altanero “que desea”, un displicente “que le trae por acá” o en el mejor de los casos un letánico “como vamos”. Aún, el “te amo” original ha sido sustituido por el “te amo” telenovelesco, el “te amo” del decir por decir, el “te amo” histriónico que los actores pronuncian sin ningún problema aunque estén a años luz de sentir lo que sus labios pronuncian.
No los escucho muy frecuentemente ahora, pero hay expresiones que han sido y son utilizadas para expresar una actitud, una intención, una predisposición. “A quien debo matar” significa que la persona está lista para cualquier orden, está dispuesto a hacer lo que se le diga; otros dicen que es característico del tipo que tiene espíritu de equipo, una forma de decir “estoy a la orden”. “Para cuantas tienes” era una manifestación verbal muy recurrida que se utilizaba, me parece, hasta hace poco y que denotaba una predisposición permanente a tomarse unos tragos; era el eslogan predilecto de un beodismo beligerante en la búsqueda constante de libarse unos pomos y poner a prueba su hígado, su sistema digestivo y sus bolsillos.
Sin embargo, no podría terminar estas pinceladas a las palabras (o frases) mágicas de ayer y hoy, sino le diera un toque final a este escrito haciendo referencia de refilón a dos frases muy empleadas en la actualidad. “Cómo es contigo”, por ejemplo, significa muchas cosas: un reclamo por no haber asistido al fútbol vaso de patas del último sábado, una forma de recordar a alguien una cuenta pendiente de pago, una recriminación por una llamada que no hiciste anoche, un reproche por un compromiso asumido que no has cumplido; y ¡ojo, tenga cuidado!, entre los microcoimeros esta frase es, a veces, un emplazamiento al trabajador contratado –planilla, contrato administrativo, locación de servicios- que aún no ha hecho llegar las cuotas convenidas a quienes han intermediado para su contratación. Un día, escuché que a una persona contratada por 1,800 soles le decían la frasecita mágica: “cómo es contigo”. Este buen hombre me comentó después que en realidad ganaba 1,100 soles, porque debía entregar 200 a fulano, 200 a zutano, 200 a mengano y 100 a perencejo, y que debía hacerlo porque si no corría el riesgo de que no le contraten al mes siguiente.
Sin embargo, una de las frases mágicas más usadas entre los mafiosos medianos y de alto vuelo es ésta: “¡cómo es la mía, brother!”. ¡Tenga más cuidado con éstos!. Viven muy bien, tienen fortuna, pero quieren más, los angurrientos éstos.
Soy maestro y agradezco al ing. Moisés Panduro porque gracias a el 300 maestros se nombraron en educación luego de aprobar con nota 14 o mas los dos examenes que se nos exigian, tenemos un gran recuerdo de el por que intercedio siendo secretario general del APRA ante el Ministerio de Educación para que se cubrieran las plazas que quedaron desiertas y NUNCA NOS PIDIO NI UNA GASEOSA por sus gestiones, este es un hombre honesto..
Cierto, las cosas han cambiado y para mal.
Despues de todo lo que vivimos y vemos no hay duda de que antiguamente habia mas respeto y mas trato entre las personas. Pero el amigo Panduro se olvida de algo. ¿no fueron los apristas y los fujimontesisnistas los que acentuaron y oficializaron toda esta calamidad?¿no fueron este par de lumpenes los que prostituyeron, mansillaron, vejaron y destruyeron la cultura para instaurar a la fuerza su cultura combi?¿no fueron estos delincuentes los que convirtieron todo el aparato politico y por ende a la sociedad en una cloaca?¿no fueron estos indeseables los que institucionalizaron la coima, la corrupcion al mas alto nivel?
¿de que nos quejamos ahora si estos miserables instauraron la pendejada como modus operandi, la criollada como modus vivendi?¿no fue tu jefe el bipolar quien eternizó la frase: la plata llega sola?
El lenguaje y el comportamiento delictivo de estos personajes se ve hasta ahora en el congreso. ¿y no fue el aprista Leon Alegria el que inmortalizó la frase: hizimos un gran faenon?
¿no fueron los apristas quienes metieron al magisterio a gente sin ningun nivel educativo a «enseñar» en los colegios?
Pobre señor Panduro, quiere ver lo malo en los otros , nos quiere hacer creer que otros son los culpables de esta desgracia cultural que padece el Perú. No se haga el chejo. Todos sabemos el enorme daño que le hicieron al Perú el Apra y los fujimontesinistas. Y lo que usted comenta en su nota es una pequeña muestra.
¡¡Otro Perú, otro mundo es posible!!
brother se dicen los de fuerza loretana.
Amigo Panduro, como que te causa extrañeza, si esto es el modo de operar del apra. No me contaron, yo lo ví. Tal como relatas… a una persona la contratan con un buen sueldo, pero en realidad ella no percibe esa suma. Hay una repartija del sueldo entre varios personajes ligados al partido.
Lo que está contando en su columna es en realidad lo que hizo cuando el apra estuvo en el poder… a ver diga que no es verdad?
Un buen punto par usted mi querido amigo, que en realidad las personas y sobre todo los jovenes han perdido el sentido sobre el respeto que se merecen los demás y ellos también; cuan hermoso se siente cuando una persona expresa estas frases magicas que abren muchas puertas, podriamos decir que es una carta de presentación para cualquier persona, algunos amparados en su profesión creen que pueden expresarse como quieran y de alli la frase «el que tiene dinero habla como quiere», cosa más equivocada. Usted siempre ha expresado que el comportamiento y el trato que se da en la administración pública debe ser cordial con todos los usuarios, a sido un gusto trabajar con usted creo que hemos aprendido cosas que se nos estaban olvidando. Bien por las personas que aun tienen valores y que se expresan como personas civilizadas y educadas.
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