Desmañas
Por Miguel DONAYRE PINEDO
Como sudaca de varios pucheros las medidas de ajuste, desregulación, privatización, recortes y de todos los sinónimos que existen alrededor de estas acciones del Estado a favor de la empresa privada y en desmedro de la ciudadanía en España no me suenan raro o a cuento chino como diríamos [sumado a la desconfianza a la clase política que cada vez da la espalda a la necesidades de la mayoría de la población]. Más bien a los de la diáspora parece que nos persigue como una sombra. Fue una pesadilla que pasamos los peruanos y que hasta hoy sufrimos las consecuencias – observemos el sistema privado de pensiones, un despropósito sin todavía enmienda [incluye el ejercicio del poder de Fujimori, Toledo, García y parte de Humala]. En el caso peruano tenemos que en aras del mercado y la libre competencia se “desreguló” [vaya palabreja] el transporte privado dando cancha libre a la iniciativa privada y miren lo que hemos conseguido: el caos a la enésima potencia. Un guirigay intraducible. Recuerdo que un profesor de Derecho embriagado de las fórmulas del libre mercado se jactaba en un artículo que la famosa desregulación era la panacea del transporte público, claro, seguro que él viajaba en su propio carro. En el caso amazónico los motocarros no han sido la solución para el transporte público, son la asfixia al entorno urbano y natural. Como peruanos que vivimos estas experiencias a los dos lados del charco no queda solo la indignación a las desmañas de los gobernantes.
