Engañados

Engañados

ESCRIBE: Jaime Vásquez Valcárcel

La izquierda peruana más insensata siempre tendrá que prestar algún vestido para creerse ganadora de algunos procesos electorales. Los líderes siempre hablan del pueblo desposeído y a quienes dicen defender nunca le  da  el respaldo suficiente para ganar una elección. Lo vivimos con Alberto Fujimori y lo revivimos con Ollanta Humala. No es que hayan sido decisivos en el triunfo de ambos. Sino, como ya se ha hecho una sana costumbre, fueron decisivos en la derrota de Vargas Llosa, primero y de Keiko Fujimori, años después. Son especialistas en derrotas y en ese carril quieren mantener a quienes desde otras perspectivas quieren transformar el país.

El penúltimo en hablar del actual gobierno –que no es de derecha ni de izquierda, sino todo lo contrario, como desliza mexicanamente César Hildebtrandt en su última columna- ha sido el excongresista César Barrera Bazán, uno de los tantos que ha parido la izquierda peruana, quien ha dicho que el presidente Ollanta Humala se ha comportado “igual que Alberto Fujimori” ya que llegó al poder y no cumple con sus promesas. Para añadir un toque de sentimiento  a sus declaraciones agregó que es “algo lamentable en nuestro país”. No es para tanto. Lo que sucede es que la izquierda peruana se ha comportado como siempre. Como si desconocieran la historia.

Lo más sensato hubiera sido que muestren su respaldo a las propuestas de Ollanta Humala y no participar de ese proyecto electoral llamado Gana Perú. Porque ese proyecto liderado por Humala tenía en claro que había que dorar la píldora para ganar las elecciones. ¿Acaso nuestro presidente no cambió hasta el color de los polos que usaba para dar otra imagen ante el electorado? La izquierda no se hubiera sumado a la máscara electoral y hoy sus representantes saldrían a los medios a despotricar del cambio y no a lamentarse porque le han quitado los cupos que hace poquito disfrutaba la cúpula de los reciclados.

No es que analicen un retiro del entorno palaciego sino que no les quieren en ese entorno. Así como Barrera Bazán cree que Humala se comporta como lo hizo Alberto Fujimori la izquierda local repite similar libreto. Pero a su manera, claro. Con sus poses de autosuficiencia cuando no logran los votos suficientes para ganar una elección de barrio. Repiten década tras década que son los únicos que defienden a los pobres y ni los pobres entienden su mensaje. Llenan los espacios que mendigan con lugares comunes que los hace más comunes aún.

Hoy les ha engañado Humala, ayer Fujimori, mañana ya buscarán un nuevo personaje que los mantenga en vitrina aunque sea con los mismos engaños. Porque al final no es que se sientan ofendidos por el engaño sino que deberían agradecer a quien los trata así porque de alguna forma eso hace que se mantengan en vitrina. Si en Lima los excongresistas salen con teorías del engaño en Iquitos tenemos que soportar a aquellos que no le han ganado a nadie y serán eternos candidatos engañados reciclados para perder cuantas veces sea necesario.