Okuribito

Por Miguel Donayre Pinedo

De las películas japonesas que he visto me interesa mucho la exploración al hondo mundo interior de sus personajes. Narran las descosturas, desgarros, alegrías, secretos, culpas y liberaciones. En esta oportunidad en el film, Okuribito, Despedidas, un pata músico que tocaba el chelo queda sin trabajo al anunciar el mecenas de la orquesta que todo se ha terminado. Se siente que ha fracasado y con culpa: no sabe más de su padre que los abandonó cuando era pequeño y cuando murió su madre, él no pudo llegar a los funerales. A propuesta de su mujer deciden regresar al pueblo donde tenían la casa que heredó de su madre y en la búsqueda de trabajo lee una oferta sobre una agencia de despedidas. En realidad, era una agencia de pompas fúnebres, los que ponen guapos a los muertos. La necesidad hace comerse el orgullo y acepta la chamba. Y raíz de este trabajo se vuelve una relación estoica con la muerte, no de manera melodramática sino desde la reflexión. Uno de los muertos era una bella mujer pero en la ceremonia de preparación se da cuenta que era hombre, y esa situación había generado un serio conflicto familiar, pero que la muerte le hace entender a la familia la decisión del deudo que falleció de la muerte dulce, aspiración de anhídrido carbónico. A través de este trabajo incomprendido por amigos y su mujer, se reconcilia con su madre, conoce a su padre muerto y se entiende mejor este último peldaño de la vida en si misma. La película ha sido ganadora de un Óscar como mejor película extranjera. Y gran regalo del estío.

2 COMENTARIOS

  1. ¿Veremos Okuribito en IQT? No lo creo. Muy dificil ver una buena película extranjera en donde nos martillan la cabeza con los bodrios de holywood. Esperamos un milagro.

  2. ¿Veremos Okuribito por tierras loretanas? Muy dificil. Es casi imposible ver una buena película extranjera en lugares donde nos han impuesto las mediocres películas de Holywood. Esperamos un milagro (tal vez en octubre).

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