Habla sobre política y elecciones:

Warren Gonzáles Martínez, loretano que estudió Derecho y Ciencias Políticas en la histórica Universidad Nacional Mayor de San Marcos, nunca deja la política ni el derecho. Fue impulsor allá por la década del 90 del fortalecimiento del Movimiento Regionalista Loreto, el famoso MRL que fundó Jorge Luis Donayre Lozano. Fue candidato a Diputado en 1990 y compartió lista con el popular Condorito y con Iván Vásquez Valera, que ese año debutó en las elecciones. Warren luego postuló al Congreso en el 2016 por “Perú Posible” de Alejandro Toledo. Hoy mira con expectativa y algo de nostalgia los acontecimientos políticos en Loreto y el país.

¿Sería nuevamente candidato al Congreso luego de la experiencia del 2016 con Perú Posible?

En política nada está dicho. Una candidatura debe ser expresión y reflejo de la voluntad de una colectividad política de la que eres parte, implicando ello ser el resultado de la democracia interna a la que necesariamente debe someterse el candidato. Tratándose de un militante, y tratándose de un no militante, una invitación como tal debe ser reflejo de coincidencias ideológicas, políticas y programáticas entre el candidato y la organización política. Dicho esto, no descarto la invitación a darse en este nuevo escenario electoral que debo evaluar.

¿En 1990 fuiste candidato por el MRL, hoy los movimientos regionales han desaparecido, volverán alguna vez?

En efecto, en 1990 fui candidato a Diputado por el Movimiento Regionalista Loreto, que tenía como símbolo el otorongo y como líder al fallecido Jorge Luis Donayre Lozano, quien fue elegido como tal. Entonces los movimientos regionales tenían cabida en las contiendas electorales para la elección de Diputados, mas no para Senadores. Eran otros tiempos y otra normatividad legal. Hoy por mandato legal los movimientos regionales no tienen posibilidad de postular directamente candidatos al Congreso sino a través de los partidos políticos nacionales mediante alianzas. Eso surgió a partir de la Carta Política de 1993, castrando a las regiones de tener auténticos representantes en el Poder Legislativo. Tan sólo una enmienda constitucional podría generar la reforma electoral en la composición congresal a partir de la elección de candidatos auténticamente regionales.

La política ¿se ha, banalizado e idiotizado?

Yo creo que la política se ha degradado en todos sus niveles. No existen propiamente partidos políticos en el Perú, hay una crisis generalizada. El golpe del 5 de abril de 1992, dado por Fujimori, los desarticuló, rompiendo el nexo entre sistema político, ciudadanía y sociedad. No se pudieron reestructurar, menos superar la agonía. Los que formalmente existen en unos casos se han convertido en cenáculos de dirigentes, clubes de amigos, etc., y otros en vientres de alquiler. De democracia interna ni hablar, pues es una frase lírica de la normatividad electoral. La prueba palmaria es la situación de falta de representación de la sociedad en el Congreso disuelto, y lo que pasó en el Referéndum del 2018, cuando se consultó a los electores sobre 4 temas, y los partidos políticos en lugar de convertirse en foros de discusión asumieron el papel del avestruz.