Martín no pudo culminar sus estudios de Administración

“VISTIÉNDOME DE MUJER ME GANO LA VIDA”

Martín se disfraza de mujer para vender sus golosinas
Martín se disfraza de mujer para vender sus golosinas

Muchos dicen que el trabajo dignifica al hombre y que mientras se trabaje honradamente no debemos sentir vergüenza del oficio que desarrollamos. A veces la necesidad obliga a muchas personas a ingeniárselas realizando trabajos que quizá para muchos, en una ciudad tan prejuiciosa, sea motivo de una mofa ignorante. Martín Sánchez Miranda es un padre de 35 años que se gana la vida vendiendo caramelos y gomas de mascar en las principales calles de Iquitos, pero Martín lo hace de una forma peculiar. Él se viste de mujer como parte de una estrategia para simpatizar a sus posibles compradores, quienes muchas veces no comprenden el trabajo de este noble hombre que trabaja día a día para mantener a su pequeña hija.

Martín espera encontrar un trabajo más estable que le permita mantener a su pequeña hija y culminar sus estudios de administración, así una vez convertido en profesional pueda brindarle un mejor futuro a aquel pequeño ser que le cambió la vida.

¿Eres padre de familia?

Claro, soy padre de una hermosa niña de casi tres años que es mi adoración y es el motivo de mi vida y del esfuerzo que pongo día a día en trabajar para que nada le falte.

¿Vive con la madre de su hija?

No, estoy separado de la mamá de mi hijita. Mi niña vive con su mamá y su abuelita, pero yo siempre estoy yendo a verla.

¿Dónde vive?

Yo pago doce soles diarios en un hospedaje por Punchana, tengo que ingeniármelas para que me alcance la plata para todos mis gastos.

¿Cuánto tiempo en este oficio?

Con esta ocupación mantiene a su pequeña hija
Con esta ocupación mantiene a su pequeña hija

Un año y medio recién. Es el tiempo que llevo en esta ciudad y tengo que vestirme de mujer para caer en gracia a las personas que con mucho respeto les ofrezco mis chiclecitos; vistiéndome de mujer me gano la vida.

¿Dé que ciudad es?

Yo soy de Chiclayo, vine a trabajar aquí de cocinero porque estudié gastronomía, pero lamentablemente me quedé sin chamba y tuve que ingeniármelas porque tengo una hija que mantener.

¿En qué se ocupaba en Chiclayo?

Bueno, allá me dedicaba a manejar combis y luego que venció mi licencia ya no la renové porque vine por acá y ya tuve que ingeniármelas.

¿Piensa volver en algún momento a su tierra?

Estudió Administración de  Empresas pero por motivos económicos no terminó
Estudió Administración de Empresas pero por motivos económicos no terminó

Bueno, estoy pensando volver a fin de mes volver, porque allá en Chiclayo, la verdad, tengo más posibilidades de trabajo, pero lo que me ata a esta ciudad es mi hija que no podré llevármela porque su mamá jamás la dejaría y no quiero alejarme de ella. Aunque trabajando yo allá la plata no le faltaría porque le enviaría más dinero de lo que acá le puedo dar, pero no será igual, la extrañaría bastante.

¿Cómo se le ocurrió este oficio?

Yo tengo un amigo que se gana la vida también con esta chamba y noté que le iba bien, así que decidí imitarlo y poder al menos de esta manera tener algún tipo de ingreso.

¿Cuánto dinero genera en un día?

Normalmente saco unos sesenta o setenta soles, pero cuando el día está bueno puedo obtener unos ochenta o cien soles en un solo día, pero es bien rebuscado.

¿Es fácil ganarse la vida de esta manera?

La verdad tengo que lidiar primero con la vergüenza que uno como varón puede sentir vistiéndose de mujer, luego así como encuentro gente amable que me compra y a veces no, pero me atienden con cariño, existe gente que me discrimina porque consideran que yo vistiéndome de mujer soy un pobre payaso que puedo estar por debajo de ellos, cuando ante las leyes del hombre y la de Dios somos iguales. Tengo que seguir trabajando nomás, todo sea por mi hijita.

¿Tiene algún estudio superior?

Estudié seis ciclos de administración de empresas, pero no lo terminé por motivos económicos; sin embargo, pienso en algún momento acabarlo porque nunca es tarde para estudiar, ese es uno de mis sueños: acabar mis estudios superiores.

¿Tiene una ruta estable todos los días?

Yo normalmente no tengo un camino fijo por donde ir, camino por todo Punchana y por acá por el centro. El día del paro no te imaginas cuanto caminé, fue el día que más camine porque no había gente y tenía que rebuscármelas.

¿Tiene comunicación con su familia en Chiclayo?

La verdad es que en mi familia no saben que estoy así. Ellos pudieran ayudarme económicamente para terminar de estudiar y todo eso, pero no quiero incomodarlos, ya soy demasiado grandecito como para estar pidiendo a mis papás que me mantengan. Tengo una hermana en Estados Unidos también, pero no quiero molestarla, quiero yo mismo responsablemente ganar mi plata. Me daría un poco de vergüenza pedirle plata.

¿Qué le diría a aquellos jóvenes que en vez de trabajar se dedican a delinquir?

Es tan bonito ganarse la vida honradamente sin que nadie te señale, a veces la necesidad te puede llevar a cometer muchas cosas, pero hay que pensar dos veces antes de convertirse en un triste delincuente que no gana su plata, sino que agarra lo ajeno y jamás podrá decir esto es mío porque nada le ha costado ni se lo ha ganado.