En medio de la inmundicia. Ambulantes expenden comida en la intersección de la calle Nanay y Arequipa, entre montículos de basura y aguas servidas que se acumulan en los hoyos de las pistas.

“Estamos cansados de eso, cuando vendía ahí, tenía que limpiar y barrer. No tenemos el apoyo de la gente, solo habla y habla”, comentó una vendedora identificada como Carolina.

Los vendedores pagan diariamente S/1.50, dinero que según señalan es destinado a los arbitrios más no a la limpieza del lugar. 

Doña Carolina no ve que en un futuro próximo puedan ingresar a vender sus productos al nuevo mercado Modelo, pues señala que aún falta mucho para la infraestructura este lista para albergarlos. 

“Ya nos cansamos de escuchar que siempre digan que estará listo a fin de mes”, dijo.