[Organizada por “Líderes con Cristo” de parroquia “San Martín de Porres”].

540Escribe: Randy Wagner Ríos Gutiérrez – randyriosg@gmail.com

Es común ver en esta época del año cientos de chocolatadas organizadas por instituciones públicas y privadas en los sectores más necesitados de Iquitos, quizá algunos obligados por resguardar la buena imagen de su empresa, quizá otros con el único deseo de colaborar en algo con la Navidad de los niños más pobres. A esto se suman los políticos que interesados en ganarse uno u otro voto aprovechan estas fiestas para realizar mega chocolatada. El grupo “Líderes con Cristo” de la Pastoral Juvenil –PJ de la parroquia “San Martín de Porres” realizan durante todo el año labores de ayuda social en diferentes zonas de Iquitos. En esta Navidad decidieron no sólo llevar chocolate y panetón a  ciertos niños, sino que se trazaron un reto aún más grande: regalar una cena navideña completa a pequeños que seleccionaron previamente.

¿Por qué sólo regalarle un pedazo de panetón, un vaso de chocolate y una pelotita a un niño pobre? Esto fue lo que se preguntaron los integrantes del grupo de agentes pastorales “Líderes con Cristo”, jóvenes católicos que decidieron seguir a Cristo y luchar por imitar sus acciones y enseñanzas, integrantes de la parroquia “San Martín de Porres” cuyo párroco es el tan querido y popular sacerdote maltés Raymundo Portelli. Estando seguros que los niños estarían más contentos con una cena navideña más que con una simple chocolatada, decidieron ponerse un reto que resultaba en un primer momento difícil pero no imposible, es que siendo jóvenes que no gozan de un nivel económico elevado y sin ningún tipo de ayuda política o de otras instituciones, los líderes tuvieron que esforzarse para que la noche del 24 de diciembre, vísperas del nacimiento del niño Jesús, consigan los insumos necesarios para preparar la más especial cena de noche buena. Cada líder se encargó de buscar a dos niños, los más humildes que pudieran encontrar, para regalarles la alegría de que por primera vez tuvieran una cena navideña. Se escogió la casa de uno de los integrantes y trabajaron desde tempranas horas para que el evento salga exitoso. Encomendándose a Dios comenzaron con el arduo trabajo, separándose en grupos de limpieza, cocina y decoración.

Al promediar las siete de la noche ya todo estaba listo, los líderes fueron en busca de sus niños trayendo un total de 36, a quienes los atendieron de manera muy especial. El riquísimo pollo asado acompañado con arroz especial y ensalada blanca fueron de mucho agrado por parte de los pequeños que también fueron servidos con panetón y chocolate. Finalmente se procedió con la entrega de regalos.

La cara de emoción y satisfacción de los niños que pudieron gozar de esta cena navideña, fue el mejor pago que el grupo “Líderes con Cristo” pudo recibir. Acción que no solo realizan cada fin de año, ya que este grupo de jóvenes llevan ayuda social durante todos los meses del año a determinadas personas que necesitan de una mano amiga. En tiempos en el que la navidad se volvió más en una fiesta comercial que cristiana, es bueno recordar el verdadero sentido del 25 de diciembre, fecha en el que nació el salvador d la humanidad, aquel niño que hace más de 2 mil años nació en un pesebre, en un pueblo llamada Belén y que como todo niño desea celebrar su cumpleaños en compañía de sus amiguitos que hoy están representados en todos los niños de la humanidad y por eso merecen pasarla de manera especial.

“Gracias a todos los líderes que pusieron su mayor esfuerzo en esta cena, Dios bendiga a cada uno de los integrantes y a sus familias. Después de mucho tiempo mi navidad volvió a tener sentido”, Alen Valles del Águila, coordinador del grupo “Líderes con Cristo”.