Un paso para adelante y dos para atrás
Por Miguel DONAYRE PINEDO
Aquí al nuevo presidente de gobierno de España le conocen como el mudo. No habla, es esquivo y cuando habla mete la pata o dice pachotadas. Apenas ha dado una entrevista de 25 minutos luego de tomar drásticas medidas y auguran que todavía viene lo peor. Los que más hablan son sus ministros aunque no en medios locales sino a medios extranjeros, al menos en economía. Ninguno de los responsables de las finanzas en España habla en los medios periodísticos españoles, lo hacen con los medios de comunicación de fuera. ¿Será el miedo o temor calculado de las decisiones a tomar? No se sabe o sí, como habla Rajoy, es el ser de la nada, de la indefinición. Se escuchan solo rumores de las posibles medidas. Donde sí están dando los primeros pasos es en desmontar la legislación hecha por el gobierno anterior como ha sido en el caso del aborto -se retrotrae a la normatividad vigente en 1985, reforman la educación para la ciudadanía, la ley de educación. Se les ve el ramalazo más carca de lo que suponíamos [me repugna el exalcalde de Madrid y hoy ministro de justicia, se pone la careta de liberal y es un meapilas de temer]. Es muy curioso que esta derecha casposa le rinda genuflexión a la iglesia más rancia. Están bajo su tutela mental. No tienen pensamiento libre, me recuerdan a los liberales del siglo XIX en Perú, en ese interesante estudio de Fernando de Trazegnies, sobre las sociedades de modernización tradicionalista que se esforzaban por ser modernas pero el lastre conservador- rentista no los dejaba. Esto es lo que hay.
