Miguel Fuertes, administrador del Vicariato Apostólico de Iquitos, cuestionó que los asegurados aporten muchos años y cuando necesitan ser atendidos no puedan hacerlo. No tienen oxígeno suficiente y la gente se muere en los pasillos, dijo el sacerdote. “Qué pasa con EsSalud, hace tres días murió una persona sentada en una silla en EsSalud, una persona que ha estado aportando toda su vida, dónde está la plata, es un fracaso en esta situación que se vive porque pide a la DIRESA oxígeno cuando es su obligación atender a los asegurados”, dijo.
El representante de la Iglesia en Iquitos también se reafirmó en aquellas palabras pronunciadas en la homilía por el aniversario de Iquitos donde decía que la pandemia sacó a la luz lo mejor y peor de los ciudadanos de Iquitos. “Ya hemos comenzado a ver gestos de solidaridad y también gente que se aprovecha de la situación”, expresó.
Fuertes, en declaraciones a Pro & Contra Digital, confesó que recibió llamadas telefónicas de médicos de EsSalud que le pedían oxígeno cuando en ningún momento el Vicariato tuvo a su cargo la producción. Lamentó que se propalen noticias falsas en las redes sociales donde se ofrezca que en la parroquia San Martín de Porres se llenaba los galones de oxígeno, lo que motivó que varias personas acudan hasta dicha parroquia.