CURÁNDOSE EN SALUD

Javier Vásquez

Este año se abre con varias interrogantes respecto al tema de salud en nuestra región. Lo primero y más que una pregunta, una realidad: la pronta inauguración en el Hospital Regional de Loreto de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) neonatal, una de las mejores equipadas a nivel nacional, que permitirá dar una excelente atención a nivel regional a todos los neonatos con problemas. Así mismo, para que vaya acorde a la infraestructura, se están capacitando a los profesionales médicos y enfermeras en el manejo de estos pacientes tan delicados. También se han adquirido modernas incubadoras y mucho instrumental de punta para el manejo y diagnóstico oportuno de las patologías que afectan a este grupo etareo.

Ahora vienen las dudas de todos los años y que son de larga data: la mortalidad materna que, si bien ha disminuido en los últimos 10 años, sigue siendo uno de los principales problemas de salud. La principal causa de muerte es la hemorragia que se presenta durante el parto o inmediatamente después de él. Para disminuir esto se necesita una decisión política: dinero, capacitación, educación, servicios básicos a la población menos favorecida, equipamiento adecuado de las instituciones de salud del primer nivel que son las que atienden en primera instancia a las pacientes y lograr la atención del parto institucional ya que la mayoría de estas muertes ocurren en domicilio o durante el traslado a un centro de salud.

Lo siguiente es la endemia de enfermedades transmisibles como dengue, malaria, leptospirosis, dependiendo su control básicamente de la prevención que está bajo la responsabilidad de la Dirección Regional de Salud y de cada uno de nosotros. Se deben realizar campañas de fumigación periódicas y debemos colaborar permitiendo el ingreso del personal de salud a nuestros domicilios. Debemos desechar la basura de manera adecuada, eliminar envases o todo material que sirva de reservorio de agua de lluvia donde los zancudos encuentran el hábitat adecuado para su reproducción. Debemos implementar medidas higiénicas rigurosas en nuestro hogar y transmitir todo esto a nuestros hijos de tal manera que se haga un buen hábito.

Hay otras enfermedades como el SIDA y la tuberculosis que tienen el beneficio del tratamiento gratuito por parte del estado, pero para ello se debe diagnosticar oportunamente aumentando la cobertura de las pruebas indicadas a toda la población, dando preferencia a la de riesgo.

El cáncer de cuello uterino sigue siendo un problema mayor. Al hospital llegan generalmente pacientes con metástasis en las que hay muy poco que hacer. Aquí sí la prevención es el arma más importante que tenemos. El Papanicolaou debe ser gratuito y abarcar el 100% de mujeres en edad fértil, para ello se debe educar a la población de su importancia, de su uso, sirve para detectar lesiones precancerosas principalmente, no para identificar infecciones por hongos u otros.

Por último, y no lo menos importante, la desnutrición infantil y las infecciones respiratorias en los niños que es el grupo más vulnerable. Se debe reforzar la alimentación buscando las estrategias adecuadas, se debe educar a los padres para las precauciones adecuadas en la prevención de las enfermedades respiratorias, se debe favorecer el acceso oportuno a los servicios de salud y brindar una atención cálida y oportuna.

En fin, hay mucho que hacer y depende mucho de nosotros. Para exigir al estado, que es nuestro derecho, debemos ser responsables con nuestra familia y nosotros mismos tomando todas las consideraciones para mejorar las condiciones de salud en nuestro ámbito. Es lo más sencillo y lo más difícil porque requiere compromiso y constancia.