En la región de San Martín, específicamente en Tarapoto, la empresa Agroindustrias Las Tres Rosas se prepara para comenzar la plantación de 400 hectáreas para aumentar su producción en sus dos líneas de negocio en tres años.
Todo empezó con los padres de Rosa Cóndor, negocio que hoy ella dirige. Comenzaron como recolectores de una empresa de snacks en Chimbote (Áncash), sin embargo, al ver que gran parte de la fruta quedó por no cumplir con la estética, comenzaron a convertirla en escamas. Ahora tienen dos líneas de producción: de un coco pueden obtener hasta 10 productos.
En su línea de bionegocios, la estrella es el coco rallado, así como las hojuelas y el coco deshidratado. Mensualmente exportan entre 10 y 20 toneladas de los tres productos a Quito (Ecuador) y Medellín (Colombia). El próximo objetivo es Brasil y Estados Unidos, con este último comenzarán a tramitar permisos y certificaciones.
“Soñar no cuesta”, es la frase que destaca Carolina Guadalupe, gerente de Helados y Chupetes Super Frio’s SRL, que transforma 20 frutas de Ucayali, como camu camu, cacao, café, mango y aguaje. Planean aumentar su producción entre 10% y 15% para entrar a Lima.
Super Frio’s cuenta con al menos un congelador en el 80% de las escuelas de Ucayali, donde sus paletas son elaboradas con un 50% de pulpa. Para tiendas y mercados sube al 60%; y su línea premium (90% celulosa) se comercializa en hoteles, además del aeropuerto y Tottus.
Otro es el caso de Yudith Chinchay, quien retiró S/ 6.000 de su AFP en medio de la pandemia e hizo bocadillos de castaña y empezó a participar en ferias. “Eso nos motivó”, dijo el gerente de Agroforestería Jacum en Madre de Dios, donde la castaña es el producto ‘bandera’.
Al ser un fruto que no se cultiva, sino que se cosecha, de la pulpa elaboran las hojuelas, que Chinchay aromatiza con orégano, chiles, hasta canela, o para acompañar con postres. Mientras que el ‘coco’ o cáscara se usa para hacer velas perfumadas que venden en el mercado local y otras se envían a Brasil luego de participar del Expo Amazónica.
Ahora buscan seguir expandiéndose. Han logrado envíos a Chiclayo, Arequipa y también a Pucallpa, y están cerrando convenios con tiendas de Lima. También tiene un cliente en Suiza y para Estados Unidos quieren llegar a través de un bróker. Cuentan con una planta de producción mensual de 20 barriles de copos de castaña.
