“Oportunista, arribista y corrupto” fueron los calificativos que recibió Vladimir Cerrón de parte de los asistentes al debate que tuvo lugar en el local partidario de Perú Libre, en Breña.

Al parecer empezaron a salir las pugnas al interior del partido político, donde los militantes buscan ocupar cargos por el apoyo otorgado durante la campaña electoral que le dio la victoria a Pedro Castillo, hoy presidente de la República.

Desde ya se dan varias posiciones, como la de Iván Lanegra, secretario general de Transparencia, y Samuel Rotta, director ejecutivo de Proética, quienes consideran que el mandatario electo tenga una posición clara respecto a que no debe haber influencias indebidas, y que sería importante que se deslinde de Cerrón para dar una señal anticorrupción.