Lo que son las cosas. El congresista Yony Lescano, acusado de acoso sexual, atacado en su momento por los unos y los otros, castigado por el Congreso, ahora disfruta del silencio cómplice. Nadie parece acordarse de la periodista que lo denunció. Es decir, todo el mundo hace como si nada grave hubiera pasado. Increíble.