De manera clandestina y sin contar con ningún permiso, en la avenida Quiñones funcionaba un lavadero de jabas de pollo, perteneciente a la empresa Don Pollo.
Hasta el lugar llegó el área de División de Comercialización de la Municipalidad de San Juan, que constató que el establecimiento no contaba con licencia de funcionamiento.
Un inspector indicó que dejaron un acta de inspección para que los propietarios puedan regularizar sus documentos ante la comuna distrital.
