Las flores son la bella y llamativa seducción de la naturaleza; y no podría ser de otro modo, a fin de cuentas son el aparato reproductor de las plantas y dependen de que insectos y aves las polinicen.
En las distintas regiones del mundo, se han consumido algunas de las flores más representativas de la zona yse les ha asociado con la historia gastronómica de cada una de ellas.
Tal es el caso del jazmín, crisantemo y flor de azahar, presentes durante siglos en la cocina asiática; las manzanillas, lilas, violetas o amapolas en la cocina europea; la flor de calabaza, de maguey, el cempasúchil y el izote en México, por sólo citar unas cuantas.
En México también se consumen los cabuches o flores del cactus Biznaga de espina roja, nativas de la zona semidesértica de San Luis Potosí, los colorines y la Sak-nikté o Cacaloxóchitl.
Otras flores conocidas son la caléndula, clavel, borraja, geranio, primavera o prímula, pensamiento, tulipán, capuchina, salsifí o tragopogon, girasol, gardenias, gladiolas, flores de saúco, lirio de día, angélica, cártamo (azafrancillo de México), mostaza, verbena (apreciada en helados), malva, la dalia, etc.
Y, por supuesto, la flor de Jamaica, de la que se extrae la infusión (agua de Jamaica) y se come la flor ya cocida.
Con frecuencia, desechamos pequeñas flores que son una excelente adición a ensaladas verdes, como las flores del género allium (cebollas, poros, ajos, cebollines), las flores de la arúgula, de la albahaca, del cilantro, berro, diente de león, eneldo, hinojo, menta, mejorana, okra, orégano, romero, salvia, tomillo, ajedrea, chícharo, etc. Por lo general, sus sabores son más intensos y perfumados que los de la planta misma.
Seguro que comes tus quesadillas de flor de calabaza con agüita de Jamaica, pero ¿por qué no añadir más flores a tu vida y a tu dieta?
Lo único importante a tener en cuenta es que deben ser orgánicas, ya que no deben contener ningún tipo de pesticidas. Por favor, asegúrate que las flores que vayas a comer no sean tóxicas.