Cuando Presidenta de Argentina a Cristina Fernández de Kirchner, viuda de Néstor Kirchner también Presidente de Argentina se le ocurrió llevar televisores a cientos de argentinos, además de ello una conexión a televisión por cable pagada por el estado, para que nuestros vecinos pudieran ver la televisión y pasearse por una programación de decenas de canales ¡Qué lujo!
Cuando Presidente a Rafael Correo se le ocurrió tener su propio programa de televisión transmitirlo por más de 50 emisoras y con una duración aproximada de 3 horas. En su programa el ex Presidente además de contar a los ecuatorianos sobre sus viajes y sus obras, daba a los periodistas lecciones de libertad de expresión y prensa.
Cuando vivo, Hugo Chávez tenía también su programa de televisión, probablemente el mismo que sirvió de inspiración a Cristina y Rafael. El ex Presidente venezolano solía responder a las llamadas de los ciudadanos – unos cuantos – por ejemplo y además de dar lecciones a los periodistas, también daba lecciones a los demás Presidentes de América Latina sobre cómo conducir y gobernar un país.
El fin de semana nuestro presidente acaba de lanzar también su programa de televisión. Se llama “Conversando con el Presidente”. Tiene una duración de 25 minutos y según me cuentan será transmitido cada 15 días y no solo se hablará de gobierno y política, sino también de fútbol. Se dice que nuestro querido Paolo Guerrero será el próximo invitado.
Pero señor Presidente ¿Es en serio? Le comento que no tengo un televisor desde el 2011, que no veo televisión por más de 10 ó 15 minutos, no porque crea que sea mala, sino porque creo que entre una cosa y otra se me va la vida. No quiero pedirle que como Cristina me obsequie un televisor y una suscripción de televisión por cable. Sino que quizá sea mejor dejar a la prensa hacer su trabajo y usted encargarse de lo que corresponde. Gobernar.
Las horas se no van volando señor Presidente. En pocos años llegará el 2021 y usted deberá entregarnos un país con una reducción de la pobreza extrema a un 1,5% y con muchos más peruanos miembros de la clase media.
En buena cuenta, usted deberá cumplir cada una de las promesas que nos hizo. Que si no hay una mayoría en el Congreso que lo apoye no es tema de conversación. Entendemos que la situación del Perú actual está a la altura de la capacidad del Presidente.
Señor Presidente ¿Es en serio?