Durante años se ha hablado de que la radiación electromagnética que emiten los teléfonos móviles está vinculada con el riesgo de desarrollar cáncer, pero ¿qué tan cierta es esta teoría? De acuerdo con los resultados preliminares de una investigación realizada por científicos del Programa Nacional de Toxicología de Estados Unidos, la radiación móvil provoca un aumento -aunque leve- del riesgo de dos tipos de tumor poco frecuentes.
Para ello, el Instituto Nacional de Ciencias de Salud Ambiental de Estados Unidos inició un estudio financiado con 25 millones de dólares con el objeto de estudiar experimentalmente los efectos de la radiación en ratas y ratones.
Las primeras conclusiones de este experimento están basadas en ratas expuestas durante una media de 9 horas al día a niveles de radiación equivalentes a los que está expuesta una persona. La exposición se prolongó durante años, hasta que las ratas ya eran mayores.
Aunque los resultados no demuestran que la radiación móvil tenga riesgo directo para las personas, comprueban que sí podría tenerlo, ya que el 2,7% de los roedores machos desarrollaron gliomas; otro 2,7% shwannommas en el corazón; de las hembras, el 2,7% también desarrolló schwannomas en el corazón; a diferencia de los machos, sólo un 0,4% sufrió un glioma.