Deporte Infantil, Salud y Disciplina

                El ÉXITO de todo deportista es el resultado de un plan de desarrollo Secuencial y de varias fasces, un estudio realizado por el Dr. Benjamín Bloom en el año 1985 dedicado al desarrollo de talento de  jóvenes, concluyo en tres fases:

. Fase temprana (romance): Pasión, Diversión, aprendizaje al máximo, actividad aun No definida, autodisciplina y responsabilidad inculcada por los padres: “si haces algo entrega lo mejor de ti”.

. Fase Media (precisión): Aprendizaje de habilidades, actividad definida con guía de profesional calificado, su duración es aproximadamente 5 años, su transición toca desde “jugar tenis/tocar piano hasta jugador de tenis/pianista”, en esta fase se valora mucho el sacrificio de los padres, tiempo y recursos, apunte con cierta proyección.

. Fase Final (integración): Individuo con profesor experto en alto rendimiento, entrenamiento varias horas al día, 6 días a la semana y           específico de su actividad.

 

                Desarrollo del talento

                Los individuos con éxito internacional estas tres fases tiene una duración de 15 a 20 años, según el estudio de Bloom precisa que solo el 10% alcanzo 12 años el suficiente nivel de maestría como para ser los mejores de su especialidad entre los 20-30 años de edad (Messi, Mozart, Woods, Nadal, Márquez). Además Bloom afirma que progresar rápido de fase No es recomendable, privara al individuo de su desarrollo psicomotriz, del mismo modo con la motivación de su nivel requerido. También precisa al No a las pausas o retrasos innecesarios para cada fase “Sin prisa, pero sin pausa”.

                Lamentablemente el desprecio de estas fases por alguna urgencia de resultados o desconocimiento, muchos jóvenes con maduración tardía quedaron excluidos del proceso deportivo.

                Para terminar, es fundamental entender que tanto factores INTRINSECOS (genéticos) como los EXTRINSECOS (ambiente, aprendizaje, entrenamiento) determinan el desarrollo del futuro DEPORTISTA. Una más, “Somos lo que hacemos repetidamente. La excelencia entonces no es un acto, es un habito”. –Aristóteles.

Abraham Gonzales Casado

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