Por Filiberto Cueva
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Tres niños; Samuel, Matías y Andrés se han perdido en “La Malvarrosa”. Una típica playa en la ciudad de Valencia, ubicada al este de España y visitada multitudinariamente durante estos días. Con lo que, perderse entre miles, resulta más que sencillo.
Samuel, Matías y Andrés no se conocían. Sus madres mucho menos. Al parecer estos 03 chicos se conocieron en el momento en el que Samuel iniciaba la construcción de estatuas de arena a orillas de la playa. Dado que no podía solo, dos chicos; Matías y Andrés aparecieron de entre la multitud para ayudar a Samuel en su arquitectónica tarea.
Las madres de Matías y Andrés, no entienden el cómo sus hijos llegaron junto a Samuel. Precisamente porque los 02 estaban tomando el sol en diferentes zonas el uno del otro y antes de llegar al lugar en el que estaba Samuel, estos dos, se tuvieron que haber conocido en algún punto de la playa. ¿Dónde? No hay cómo saberlo. “No tenemos cámaras en la playa” dice un policía.
Por su parte, los megáfonos anuncian a lo largo y ancho de toda la playa “Atención Samuel, Matías y Andrés. Acercarse al puesto más cercano de la Cruz Roja. Sus madres los están buscando”.
De un momento, cualquier niño en la playa podría ser, Samuel, Matías o Andrés. Los que oyeron el mensaje e interesados en colaborar, empiezan a preguntar a cualquier niño ¿Cuál es tu nombre?.
Con lo que, muchos niños empiezan a ser saturados con la misma pregunta. Uno más listo que otro responde antes que le pregunten: Yo no soy Samuel.
Las 03 madres están juntas. No se despegan. Al parecer la desaparición de sus hijos, las ha vuelto amigas y compañeras en la búsqueda. Se han sumado a la tarea, muchos veraneantes. Los policías han entrado a la arena con zapatos y pantalones – nada más contradictorio – pero firmes en su deber de proteger y ayudar a quien lo necesita. Los voluntarios de la Cruz Roja están atentos ante cualquier niño que pudiera aparecer y decir que responde al nombre de cualquiera de los 03 chicos.
Lo que parecía un día de verano tranquilo. Se ha convertido en un día de verano confuso ante la desaparición de estos 03 niños. Del mismo modo, en un lazo de cooperación entre bañistas, policías y miembros de la Cruz Roja.
Dos horas después han aparecido los 03 niños. No se han dado por enterados que los estaban buscando. Ellos mismos no sabían que se habían perdido. Dicen que Matías tumbó una de las estatuas con una patada. Por lo que Samuel y Andrés fueron corriendo tras él. En tanto Matías trataba de huir a paso de gigante. Corrieron tanto como pudieron para atraparlo. En el camino se cansaron. Lo curioso es que, entre tanta gente, recordaron el cómo llegar. Sus madres al verlos, no supieron si sonreír o morir en el enojo. Cualquier fuera el caso, los niños estaban a salvo.
Cuando los megáfonos anunciaron que Samuel, Matías y Andrés aparecieron y están con sus madres, sanos y salvos. Se oyeron cientos de aplausos alrededor de toda la playa. Ese día, 03 niños le habían robado el protagonismo al sol, la arena y el amor.
