La pereza mental
Por Miguel Donayre Pinedo
Cuando el periodismo se ejerce y escribe con los pies, nada pinta bien. Hace unos días una locutora deportiva de una televisión española, conocida célebremente por su conducta xenófoba con tonalidades de racismo comentaba una noticia cargada de esos matices. Era el derby vasco entre la Real Sociedad de San Sebastián y la Atletic de Bilbao, y ella con una risa hipócrita comentaba, esto es el buen deporte y fraternidad, los hinchas de ambos equipos bebiendo y brindando por el partido. Esto es un buen ejemplo, remarcaba la periodista de marras. Y miren dice después mirando seriamente a las cámaras con sus lentes que le hacen aparecer intocable. Esto es el pésimo ejemplo y salen unas imágenes del fútbol peruano entre los finalistas del campeonato y jugadores liándose a golpes. Esto no debe ocurrir, esta lejos de las imágenes de fraternidad de nuestros equipos, respingaba. Si, sabemos que lo ocurrido en uno de los partidos de Perú fue una actitud reprobable pero decir que el deporte español y el comportamiento de los hinchas es lo más paradigmático es una estupidez (quien no recuerda la cabeza de cerdo que le arrojaron a Figo los hinchas culés). Si no miren los casos de dopaje en el atletismo. Enfocar así la noticia es de un simplismo y una aberración sin nombre. Lo peor es que se degustaba en su estupidez.