Escritor Gerald Rodríguez:

ENTREVISTA: Jaime Vásquez Valcárcel

Email: vasquezj2@hotmail.com

Gerald Rodríguez conversando de todo un poco, acompañado de una tasa de café en Yurimaguas.
Gerald Rodríguez conversando de todo un poco, acompañado de una tasa de café en Yurimaguas.

“A los Quijotes de la política ya no les preguntan cuándo los entrevistan, sino que sus entrevistadores hablan por ellos, piensan por ellos y actúan por esos Quijotes que no saben ni por qué existen. Eso no es periodismo, y como digo, solo unos cuantos se salvan de la aventura improvisada de este sano oficio”.

Tras la presentación de una de sus obras en Requena, firma dedicatoria a un estudiante universitario.
Tras la presentación de una de sus obras en Requena, firma dedicatoria a un estudiante universitario.

“El Instituto Nacional de Cultura sea oficina de unos cuantos ineptos y disociables pelagatos, que lo único que hacen es hacer nada por la cultura, ausentando el apoyo de las entidades privadas, y mostrando sus carencias en la gestión para la difusión cultural, haciendo de lo cultural un completo desierto, llenos de desaciertos”.

GORRO: Gerald Rodríguez Noriega es un profesor que combina la docencia con la escritura. Está en plena preparación de la “novela de su vida”. Lo encontramos en Yurimaguas, donde se encuentra por cuestiones laborales. Aprovechamos para conversar con él y sacarle algunas impresiones sobre la actualidad cultural, literaria y otros temas más. Siempre es agradable conversar con alguien que escribe en la floresta y sobre la floresta. Y también sobre periodismo.

 

¿Gerald, en tus columnas periodísticas eres crítico sobre la realidad cultural loretana y peruana, qué es lo que se debería hacer desde una política regional para mejorar este aspecto?

La realidad cultural pasa no por un momento de crisis, en el Perú y en la región siempre lo estuvo desde la administración de la cultura por otra parte del Estado. ¿Acaso no son las empresas privadas las que siempre han dado la cara por la difusión cultural, el apoyo a su difusión y su revaloración en nuestra sociedad? Realmente no existe un claro concepto de lo que es cultura y de su importancia, esto debería hacer crear conciencia en sus pobladores, para tener mejores ciudadanos, pero lastimosamente la cultura llega a rebajarse a situaciones impuestas por la televisión y los programas degenerativos que lo que hacen es formar seres confundiendo la cultura. El espectáculo televisivo le ha declarado la guerra a los libros, a las salas de cine, a las salas de teatro, a los eventos de danzas culturales, a los conciertos de sinfónicas. El espectáculo quiere tomar forma que no le corresponde, quiere ser cultura y jamás lo será. Si eso es a nivel nacional, imagínate como estamos a nivel regional. Con un periodismo que en su noventa por ciento se arrastra tras el poder, y unos cuantos se enfrentan solos como una isla, la actividad cultural ha descendido porque no existe una política articulando todas las artes y manifestaciones culturales a largo y mediano plazo, para elevar la difusión cultural en los que quieren sentir que estamos viviendo una realidad y no una pesadilla televisiva. La conciencia está desapareciendo de nuestra sociedad porque justamente, las actividades y manifestaciones culturales están siendo ocultas con el espanto televisivo. Este tema debe ser tomado ya como un asunto emergente, renovar nuestra políticas culturales, presupuestándole, dándole mayor importancia hacia una visión turística, y dejar de que un Instituto Nacional de Cultura sea oficina de unos cuantos ineptos y disociables pelagatos, que lo único que hacen es hacer nada por la cultura, ausentando el apoyo de las entidades privadas, y mostrando sus carencias en la gestión para la difusión cultural, haciendo de lo cultural un completo desierto, llenos de desaciertos.

¿El puesto que tenemos en comprensión lectora cómo puede ser revertido?

La política educativa está buscando mejorar en algo, son muy buenas las intenciones con lo que está abordando el tema curricular, mediante programas de actualización para docentes. Lo que falta es implementar con más materiales, inclusive están dotando de libros y obras literarias a las escuelas de autores limeños, que no sé qué criterio tuvieron para calificar su difusión a las escuelas, habiendo muy buenos escritores en cada región. El centralismo literario en la escuelas sigue siendo vigente, y con esos no pensemos en mejorar la comprensión de textos. En primer lugar, el joven que es un lector especial, lee poco, no dará importancia a las lecturas ajenas de su cultura, verá con desdén el libro que no se acerca a su realidad. La difusión de un plan lector nacional y regional es el primer paso para salir de eso. El otro tema son los docentes que comprenden poco el tema de la importancia de la comprensión lectora. Tenemos docentes con aun graves problemas para abordar el tema de la comprensión lectora en los estudiantes, cómo ayudarle a mejorar, porque inclusive ellos tienen problemas. La capacitación no solo al docente del área de comunicación, sino a todos los docentes, de todos los niveles. Sería lo ideal para abordar la comprensión lectora desde todas las áreas sin ningún problema. El otro tema es la mezquindad del gobierno regional a ningunear un proyecto que por lo menos en nuestra región y con el gobernador pasado, se ha ido buscando mejorar este tema, y que por supuesto, nos han traído logros en una provincia de la región Loreto como es la provincia de Requena. No hay otra forma que tener la voluntad del gobierno regional o nacional para abordar el tema, con constante capacitación y con literatura que se acerquen a la realidad de nuestros estudiantes. Si esto cambiase, solo así podríamos salir de este penúltimo y penoso lugar en la cual no encontramos siempre, en las evaluaciones nacionales e internacionales.

¿Habrá movimientos como Trocha, Bubinzana, Urcututu?

El individualismo tan marcado de las nuevas generaciones no buscan agruparse, cada uno cree que ir solo por el mundo de la literatura es lo mejor para encontrar fama solo. El Boom Latinoamericano, no fueron un movimiento, un grupo, ni una corriente, fueron héroes literarios que no devolvieron la identidad, las máscaras que nos habían quitado desde la conquista y nos integraron al mundo de la alta cultura literaria. Entonces en el Perú se entendió tan buen eso que nuestros grandes poetas antes y después del Boom, empezaron a  trabajar en esos   de la cual no tenemos nada de que envidiar a otros países. En el ámbito local Bubinzana, Trocha, Urcututu, buscaron marcar su moda literaria, cada uno desde su visión filosófica, pero solo uno desde su filosofía estética y literaria, inclusive hasta considera a la literatura a todo un oficio, porque sí lo es. Entonces la literatura amazónica, frente nuestros orígenes, se saltan de los grupos para ir sin soga por ahí, sin sentido, pensando que cualquier cosa que se diga del indígena con palabras cadavéricas, es arte, y es que realmente el fin de al arte no es el hombre, es el arte sobre el arte, sobre toda las cosas, es la conciencia que importa mostrar.

En las provincias loretanas la falta de políticas culturales es patética, ¿no?

La política cultural en el Perú siempre ha sido patética, pensábamos que con la creación de un Ministerio de Cultura esto iba a cambiar, pero todo sigue siendo igual. El estado ha entendido que la difusión cultural no es un tema que le compete, es un tema que le debe competir a las empresas privadas, los editores y a las asociaciones privadas de difusión cultural. La revaloración de la cultura como política es fantasma ante las propuestas de tantos políticos, y no entendemos que esa actividad cultural también atrae turismo, pero como hasta en eso no tenemos las cosas claras, imagínate adonde podemos llegar con la cultura. Cuba vive casi de su turismo, uno quiere ir a un país ya sea por sus escritores que vivieron ahí, o por su pasado marcado por la historia o por la revaloración de su cultura que se difunde por el mundo. La literatura pasa por lo mismo y si el congreso no amplia las exoneración de IGV, y si no otorga aranceles por doce años más, como se había aprobado en octubre del 2003, y que en este octubre se vence, no solo será más difícil acceder  un buen libro, sino que la comprensión de texto en nuestro país será más desastrosa. Creo que por ahí debemos empezar.

¿Qué opinas sobre el periodismo loretano, con toda sinceridad?

Una gaviota no hace el verano, el verdadero periodismo como lo dijo Ryszard Kapuscinski, es “intencional” apunta un objetivo y busca genera algún tipo de cambio. En el mundo de la prensa radial, escrita y televisiva hay mucha gente mala que no debe ser periodista. Malo para fijar una pregunta que busque remover la conciencia del entrevistado, malo para diferenciar el pasado del presente. Estas gaviotas que vuelan sola en el mundo de la prensa, que son unos cuantos en la radio, televisión y escrito, tratan de llegar a eso, al cambio, a generar un cambio mediante el periodismo. Pero el resto se cuelgan en la telaraña del poder, a facturar no para pasar publicidad sino para convertirse en el Sancho panza de un Quijote que no ve claro su camino aventurero en la política. A los Quijotes de la política ya no les preguntan cuándo los entrevistan, sino que sus entrevistadores hablan por ellos, piensan por ellos y actúan por esos Quijotes que no saben ni por qué existen. Eso no es periodismo, y como digo, solo unos cuantos se salvan de la aventura improvisada de este sano oficio.

¿Cuál crees que es el papel que cumplen los escritores en el escenario regional y nacional?

La literatura es la conciencia de todo pueblo, no es su ropa, ni su sandalias, es su conciencia, y como tal, los escritores están llamados a remover los principio de la literatura que es justamente crear conciencia en los lectores mediante la presentación de su obra que le causará espanto o le impresionará como la humanidad que ha sido descrita, y que eso le hará avanzar hacia nuevos ideales y nuevas condiciones de vida. El escritor cumple el papel más importante de la sociedad, no solo de escribir lo que le venga en gana, sino que sabe que en el fondo debe escribir algo que el pueblo le exige inconscientemente que diga, que lo grite, de cualquier modo que lo haga, pero que lo diga. Justamente el arte es eso, un grito, y como todos los gritos no son iguales, cada uno busca gritar su conciencia de un sin números de formas, que luego llamaremos arte. Un grito que dice algo, un grito que nos despierta. Esos es la literatura.  En el nacional y amazónico son pocos los que han entendido este concepto, cayendo en la huachafería literaria y el vacío consiente en sus libros. Son pocos que han logrado eso, y en la Amazonia solo se cuenta a Urcututu y otros pocos, en el cuento y la novela.

¿No hemos conquistado la capital de la República en materia cultural, en espacios para que se muestre el trabajo literario de nuestros autores?

Cuando estuve hace unos meses en Lima, no solo me emocioné al ver en algunas buenas librerías de algunos distritos la difusión masiva de la literatura loretana, con Miguel Donayre, Carlos Reyes y Percy Vilchez entre otros en exhibición y en interés de quienes entran y se llevan los libros, sino que en las universidades limeñas también lo están estudiando como  un nuevo momento en la literatura peruana. Algo está sucediendo, estamos avanzando ante los ladridos de otros que solo escriben para que los lean los lectores de cementerios.  La verdadera literatura amazónica, dejó ese exotismo, la cual siempre nos han querido vender, sino que la nueva literata amazónica es justamente el hombre, su condición, su factor, su realidad y su enfrentamiento al mundo, su pasado y su presente, que hoy nos da la cara.

¿Publicarás un nuevo libro de poesía, no piensas alejarte de ese género para incursionar en otros?

Actualmente estoy trabajando ya una novela, por decir la primera en mi vida, y ceo que por ahí  me estoy encontrando lo que no encontré en la poesía ni en el cuento, que por supuesto les seguiré insistiendo más adelante, pero por ahora estoy trabajando en  esa novela y posteriormente otra. Iquitos y Lima son los escenarios, entre el poder aristocrático, lo insano de la corrupción humana y el arte de vivir indecentemente ente el poder y la miseria, como una condición de la humanidad para sobrevivir en un mundo difícil de entender. La novela se mueve en un proceso histórico marcado para muchos peruanos y por loretanos, el  oncenio de Leguía y las atrocidades contra los indígenas amazónicos, que después del caucho, nada había cambiado. Me vuelco al pasado y con un 90% de creatividad, busco recrear la debilidad del hombre ante el poder y su ambición, inclusive poniendo al propio hombre bajo el poder para alcanzar lo que busca lograr.

¿En tu época universitaria tenías referentes de la literatura amazónica contemporánea, crees que actualmente carecemos de ellos?

Tuve la maravillosa suerte de tener como profesora de un curso electivo que era poesía peruana a la poetisa, Ana Varela. Ella no solo fue una madre literaria, sino que, en su trabajo empeñoso por revalorar la cultura y trabajar para eso, nos hizo entender que la literatura amazónica estaba en proceso de reinventiba, que todo debería empezar de nuevo, y que el grupo a la cual ella perteneció que fue Urcututu, tenía bien en claro eso. Nuestra labor como jóvenes de la época era seguir ese trabajo. Indudablemente lo que la Editora Tierra Nueva viene haciendo por revalorar la cultura amazónica, elevará la literatura desde los escondites y dar la oportunidad a los que buscan de una u otra forma crecer, es otro momento aparte de nuestra literatura amazónica que ya está dando mucho que decir, porque si los perros ladran es porque estamos avanzando. Por supuesto que actualmente hay una buen referente, no solo Miguel Donayre, y todo Urcututu , que hasta hoy siguen publicando libros de la misma calidad buena de nuestra literatura peruana, sino que seguirá siendo el mayor referente de una trabajo que hay que seguir.

¿Las últimas noticias sobre el Premio Nobel de Literatura 2010, qué te provocan?

La vida privada o los escándalos de un Premio Nobel pueden ser tan llamativas, que sus propias obras. La gente que criticó duramente al Premio Nobel en los programas de espectáculos, te puedo asegurar que ni siquiera leyeron un libro de él. Yo siempre lo vi como un hombre, no como  un ángel, y lo que haya echo era lo que siempre lo hizo en su época de joven de prensa y trasnochadas con bulines. Creo que lo que pueda estar pasando en su familia es muy penoso, pero qué se le puede pedir a un artista que busca reinventarse de cualquier forma, ya sea desde el escandalo o desde la invención de una nueva vida íntima. Para mucho, Mario sigue siendo Mario, y lo que haga ya no importa, nos dio un Premio Nobel, eso nos basta.

¿Cuál crees que ha sido la época más nefasta de nuestra historia y que ha servido de inspiración para nuestros artistas y por qué?

Bueno, creo que las dictaduras militares y civiles no solo fueron tema de inspiración para muchos artistas, sino que también en la Amazonia la época cauchera encabezada por un tirano como Julio C. Arana, no solo ha servido para ejes centrales de novelas y poesías para literatura amazónica en escritores como Percy Vílchez, Miguel Donayre, Carlos Reyes, Ana Varela entre otros, sino que también cualquier proceso histórico que haya ido en contra delos principios Humanos, mostrando la verdadera condición humana seguirá sirviendo a los escritores de madera para trabajar una gran escultura escrita. El trabajo del escrito es justamente eso, rebuscar a esos momentos que todavía se ocultan en los libros empolvados de tantas bibliotecas.

¿Qué lees actualmente y cuáles son tus autores favoritos?

Actualmente estoy leyendo “Opio”, de Jean Cocteau, “La naranja Mecánica” de Anthony Burgess y “Los Orígenes del Totalitarismo”, de Hannah Arendt. Mis favoritos, bueno Empiezo por, Jaime Joyce, Vargas Llosa, Cortázar, Borges, Faulkner, Wolf, Lampedusa, Camus, Sartre, Malraux, Cummings, Rimbaud, Pound, entre tantos más;  y bueno releo siempre la poesía peruana casi en su mayoría y la poesía Loretana de “Urcututu”, como quien busca reinventarse leyendo algo bueno.