Actualmente es muy común que las relaciones jóvenes decidan llevar su relación a un nivel más alto y vivir juntos, pero sin adquirir el compromiso de un matrimonio en forma. Pero que tan bueno es realmente tomar una decisión así y dar el paso, como todo hay ventajas y contradicciones que mencionaremos.
Ventajas:
Conocer mejor a la pareja, esto ayudará a saber si son compatibles o no antes de dar el sí para un matrimonio, poder saber si se pueden llevar bien conviviendo en el mismo techo
Ahorrar dinero porque ahora se debe compartir todos los gastos y responsabilidades.
Conocer los hábitos de la pareja y acostumbrarse a ellos, lo que beneficiará en la mutua tolerancia ante actitudes o costumbres del otro.
La comunicación va a mejorar, porque aunque las peleas pueden volverse frecuentes, servirá para conocerse mejor y aprender a lidiar con las situaciones difíciles de cada día.
Desventajas:
Llegar a conocer profundamente a la pareja puede jugar en contra, porque la relación puede volverse intensa y dejar de lado los detalles especiales.
En cuanto a compartir los gastos, en algún momento tu pareja puede que no solvente su parte, lo que culminará en conflictos.
La relación puede volverse monótona si no trabajan en renovarse cada día.
Es importante analizar cada punto antes de tomar una decisión de esa magnitud y recordar los objetivos personales que se tienen para ver si son compatibles con la pareja.