Gerald Rodríguez:
Una mujer me hizo escribir mis primeros poemas
“Cuando apenas tenía siete años leí por primera vez a Vallejo, creo que él tiene la culpa de que ahora sea escritor, desde pequeño me apasionaba la lectura y mis poemas fueron inspirados por una mujer. Gracias al apoyo del gran poeta Percy Vílchez y de mi amigo José Rodríguez estoy donde estoy”.
“Mi meta es publicar otro libro y en eso estoy trabajando. Seguiré escribiendo hasta que Dios me lo permita. En Loreto existen grandes escritores y mis respetos hacia ellos, pero las autoridades y las empresas privadas deberían apoyarnos”.
¿Cómo se convirtió o por qué le nació ser poeta?
Todo empieza en los primeros años de mi vida, cuando tenía siete años. En mi casa había una pequeña biblioteca personal. Cuando me quedaba solo en casa, me pasaba todo el rato leyendo los títulos de esa grandes edificaciones librescas como “Conversación en la catedral”, “El Archipiélago Gulat”, “El doctor Zhivago”, “Las esferas de mandala”, entre otros libros que mi padre se compraba en la librería Mosquera, a la cual él asistía desde muy muchacho porque vivía en el Jirón Lima (hoy Próspero) y se emocionaba con esos títulos literarios de moda que llegaban a la ciudad. En una oportunidad me quedé solo en casa y leí por primera vez a Vallejo, creo que él tuvo la culpa que ahora me martirice tanto para escribir un poema que quiera decir algo de mí o de los otros, esos personajes sin voz que viven en el silencio y en la penumbra del olvido.
¿Quién le motivó a entrar en este mundo de la pluma?
Creo que nadie de mi familia quiso en un principio que sea escritor. Mi padre quería que fuera ingeniero, mi madre que sea militar, pero yo ya quería ser escritor. No había literatura pura en la Universidad, tuve que elegir por ser docente en el área de literatura y así estudiar lo que quería. Empecé a escribir poemas de amor, cuadernos llenos de sonetos de amor para alguien de ese entonces (si lee esto sabrá que me refiero a ella). En todo caso, fue una mujer que me hizo escribir mis primeros poemas, como siempre en los poetas (risas).
¿Qué siente al escribir?
Que sale un gran peso de mi alma. Satisfacción incompleta, porque si he acabado ya un libro, me meto en otro, y de ahí ya no sé cuándo he de terminarlo para empezar otro. Cortázar decía que “el escribir es como hacer el amor”, y de eso no tengo ninguna duda, pero teniendo que hacer una comparación por esa parte, te dijera que amaría hacer el amor, por lo que amo escribir.
¿A qué escritor o poeta loretano admira?
Más que aun poeta a toda una generación. Los Urcututos fueron los que me demostraron que no era el único loco de la ciudad que pensaba vivir escribiendo poesía. Porque hay que ser un loco para seguir escribiendo poesía en una ciudad donde la gente no lee ni compra libros de poesía, como me está pasando ahora. De verdad que no entiendo. En otras ciudades de la región, la gente se emociona cuando saben que alguien ha publicado un libro y que ellos lo conocen. Algún día cambiará esto, a pesar que siempre supe que la literatura ha sido de elite. Esta admiración incluye a Miguel Donayre. Dos admiraciones disparejas que se merecen estudios serios de sus obras.
¿Cree que la cultura en Loreto tiene apoyo de las autoridades?
Más que de las autoridades, de las empresas privadas. La labor que viene difundiendo la editorial Tierra Nueva, a cargo de Jaime Vásquez, es respetable. Un Proyecto de Plan Lector en algunas provincias con donaciones de libros y monitoreo, Semana del libro, publicaciones, otros eventos. Él siempre está abocado a apoyar y eso no es sinónimo de mezquindad. Al contrario, busca ser una piedra en la gran base del emprendimiento y el cambio para convertir a esta ciudad en algo más que una ciudad provinciana y tercermundista. Bien por esas labores.
¿Existen escritores de buena talla en la región?
Desde mi punto de vista como lector, Percy Vílchez, Carlos Reyes, Miguel Donayre son escritores de talla admirable.
¿En quién se inspiras para escribir?
Siempre he buscado decir algo que tenga que ver con el hombre amazónico y su condición humana por la cual ha sido arrastrada por el tiempo. Cuando escribo no pienso en alguien, sino en los otros, esos personajes que simbolizan nuestra propia condición humana; negados, ocultados y ninguneados por un tiempo calamitoso de grandes cambios absurdos; por una modernidad que busca negar sus orígenes.
Cuéntenos alguna anécdota que le haya pasado.
En mis primeros años, cuando como un intruso entraba a fisgonear los libros de mi padre, un día él me descubrió y como castigo me hizo leer la portada un libro, recuerdo que ese libro se llamaba “La palabra del mudo”. Esos cuentos me marcaron la vida. Un suceso que también me marcó fue haber conocido a dos grandes amigos: José Siguas y Percy Vílchez, el primero que sacó el lado revolucionario de mi juventud, el segundo me ayudó a forjar esta elección.
¿Qué libro está escribiendo y cuándo lo publicará?
Estoy trabajando en un segundo poemario que ya estoy a punto de terminar. Creo que se va a llamar “El Libro del Otro Reino”, estaría pensando publicarlo de repente a un año más adelante.
me gustaria comprar el libro donde y como lo consigo soy de IQUITOS pero estoy fuera, como hago cualquier información por este medio gracias apoyemos la literatura y el arte LORETANO
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