Luego de escuchar el mensaje del presidente de la república Pedro Pablo Kuczynski en relación a la huelga de los maestros no hay otra conclusión que: todo lo que le está pasando a este gobierno en relación a sus desaciertos y debilidad, se lo merece o en todo caso se lo ha ganado fácil. PPK ha entrado en un círculo cerrado de anunciar o ponerse en una posición tan obtusa que le puede traer serias consecuencias al sistema que lo eligió.
Relacionar a los miles maestros (porque hay que estar ciego para no ver lo evidente) con sectores violentistas y hacer de este anuncio una supuesta y enérgica posición que cale en la población para arrinconar a los maestros ante la opinión pública es realmente ingenuo. No hay duda que entre los maestros dirigentes haya algunos que firmaron por el Conare o simpaticen en secreto por esa posición, pero eso no los hace terroristas y menos a los miles que los acompañan. Ese discurso podría tener sentido o funcionar en otro gremio que no tenga necesariamente el manejo de los conocimientos en el sistema educativo, pero en el gremio magisterial es torpe, necio y políticamente nulo.
Hacerle caso a Basombrío o Martens en esta posición (aunque dice que PPK no escucha a nadie) es avanzar hacia el abismo y no ha hecho sino atizar el candelero y seguramente a partir de mañana los maestros van a encontrar gasolina en estas palabras y aquél docente tibio que pensaba que estuvo bueno ese aumento desde diciembre ahora debe estar pensando volver a las calles. Sólo por sentirse ofendido. Porque a los periodistas y a cierta opinión pública debe estar convencida que los maestros son majaderos y llegar a los dos mil soles de piso salarial cómo ha anunciado el gobierno es oportuno, no suficiente pero es lo mejor que pueden darle a los maestros, peor si la economía se ha recesado y que es un gran avance luego de diez años de haber permanecido congelado los salarios.
Pero los 450 mil maestros saben que esto no es tan cierto y que los anuncios no son como se pintan. Son dos mil soles a los contratados desde diciembre justo en el mes que termina su contrato, ósea desde el próximo año, pero de 24 horas que ahora dictan van a pasar a 30 horas es decir no es el aumento a la carga laboral actual sino a otra que recién les van a imponer. Además de por medio está la costumbre de mentir para ganar una elección, pues PPK anunció que esto lo haría ni bien llegue a gobernar y ya ha pasado un año y espera que los maestros le esperen medio más. Si mañana el Fujimorismo (cómo se prevé), anuncia que interpelarán a la ministra, lo más probable es que PPK haya abonado en esta ofensiva.
Era previsible que esto pasaría, mejor hubiera entregado su cabeza y tal vez hubiera calmado al magisterio y hasta con una adelanto de la suba de sueldos para este mes se cerraba la huelga, pero prefirió el enfrentamiento y en un gobierno que no tiene congresistas, que los que tiene no son de peso político, con una abrumadora oposición y con los achaques de la edad, lo más probable es que en los próximos meses este gobierno requiera de cuidados intensivos.