No ha pasado ni un año y este gobierno ha tenido su mayor golpe político que lo desestabiliza realmente en lo que a ellos les interesa: traerse abajo al Ministro de Economía Alfredo Thorne.
Porque, valgan verdades, cuando sucedió lo de Jaime Saavedra, el defenestrado ex ministro de Educación, era clara la intención de un grupo de parlamentarios que se habían visto afectados por la ley de reforma universitaria, pero que no representaba mayor desgaste político al gobierno, más aún si Saavedra llegaba con la mochila de ser un ministro Humalista, operativo, pero Humalista.
Y siendo sinceros también, la Educación no es un tema que les ha importado en sobre manera a los tres últimos gobiernos, porque ahí vemos las cifras que aún siguen considerando del presupuesto nacional y el gasto per cápita alumno. Hubo reformas interesantes pero el gran salto para empoderar a ese ministerio no ha existido y eso, desde Toledo hasta Humala, sólo ha estado presente en la promesa y en ciertas reformas técnicas y administrativas.
Pero traerse al mandato internacional que soporta el sistema y que encarna PPK en el Perú, es decir un ministro de Economía del ala liberal como Thorne, si es desestabilizador para el modelo que ellos han implementado en el país y que, dicho sea de paso, el fujimorismo también acaricia y defiende, pero que hoy no ha querido respetar y le ha quitado la confianza como ya estaba cantado. Ni Zegarra generaba ese impacto que seguramente se va ver reflejado en esos indicadores económicos de los que tanto viven pendientes algunos políticos y opinólogos a sueldo.
A esta mancha se ha sumado incluso el Frente Amplio, pues para ellos que salga un ministro de economía con ese perfil con su ayuda, los empodera y los tiene en cuenta para el manejo político al interior de las fuerzas parlamentarias, total, siempre es popular finalmente que un ministro de Economía se vaya a su casa. Los que si deben estar más desolados que nunca son los oficialistas que ahora tendrán que apelar, una vez más, a aceptar las propuestas para el cargo del fujimorismo o al menos a alguien que ellos les echen su bendición porque su jefe mayor el octogenario presidente que tenemos no va darles batalla.
¿Qué esperan los PPkausas? ¿Qué iba ser un lecho de rosas gobernar en el modelo que la mayoría de sus compañeros del parlamento aplaudían? Y se vienen un par más y con esto se habrá cumplido el mandato, tendremos un gobierno que prepare el retorno de los naranjas.
