La Municipalidad Provincial de Maynas es una bomba de tiempo. De suscitarse un incendio, este podría terminar en tragedia.
Pro y Contra identificó que a pocos metros de la oficina de Procuraduría, existe un extintor que está vencido, poniendo en riesgo la seguridad de los trabajadores y usuarios. En el certificado de vigencia consta que venció en octubre de 2021.
En la Gerencia de Rentas, encontramos otro extintor con la misma fecha de vencimiento, que tampoco fue recargado. Lo mismo ocurre en la oficina de Informática y en otros ambientes.
Este caso hace honor al refrán que reza: “En casa de herrero, cuchillo de palo”. Acaso el municipio no debería dar el ejemplo, ya que son ellos los propician operativos para verificar la seguridad que brindan los establecimientos.
Exhortamos al alcalde, Francisco Sanjurjo, a subsanar esta gravísima falta e “imponerse una sanción” para evitar que se siga poniendo en riesgo la integridad de la población.