El sector de hidrocarburos está paralizado en la región Loreto, la principal razón es que las empresas petroleras han desistido de realizar exploración y poco a poco se vieron obligadas a abandonar sus lotes. Todo esto empezó con el capricho del Ex-Gobernador Sr. Fernando Meléndez Celis de que Petro – Peru maneje el «LOTE 192». Cuatro años después el «Premier César Villanueva», el «Congresista Juan Carlos Del Aguila» y el «Gobernador Sr. Elisban Ochoa» están detrás de que la petrolera estatal vuelva a intentar explotar el Lote 192. Un pozo de petróleo a todas luces sobreexplotado, es decir que no resulta “RENTABLE” extraer el petróleo porque solo le queda reservas que se consideran ineficientes a precios y métodos de explotación actuales. Estos 3 políticos, por extrañas razones, intentan vendernos la idea de que todavía al citado lote petrolero le quedarían 130 millones de barriles de reservas, y con la infraestructura obsoleta actual se podría llegar a producir 13 mil barriles diarios de crudo. A pesar de todas esas “CIFRAS MAQUILLADAS”, cualquier operación en el lote 192 no sería rentable para una empresa privada, como lo evidenció en el hecho de que nadie se presentara a la licitación convocada por Perú – Petro para darlo en concesión en el año 2015 por los próximos 30 años. Sin embargo, para Petro – Perú sí sería rentable porque no tendría que pagar los 345 millones de dólares por los activos del lote que se exigía a los postores en la frustrada licitación; ni tampoco tendría que pagar por el uso del oleoducto porque este le pertenece al mismo Petro – Perú. Cualquier economista que haya comprendido el concepto de costo de oportunidad se dará cuenta de la falacia en la que incurren estos «3 Políticos». Petro-Perú aparentemente no tendría que pagar los costos reales. Obviamente, al hacerse cargo de los activos del lote 192, no hay necesidad de que Petro – Perú se gire un cheque a su nombre. Pero, por lo mismo, tampoco recibirá el cheque de 345 millones de dólares que le giraría un operador privado. (Que los activos valgan o no valgan esa cantidad es otra historia.). En cuanto a la tarifa de transporte, es verdad que Petro – Perú no tiene que pagarse a sí misma por usar el oleoducto (su oleoducto, que es una verdadera coladera de contaminación ambiental, por lo vieja que está), para transportar el petróleo que extraiga del lote 192. La división de producción de Petro – Perú se ahorraría así, digamos, dos dólares por barril. Pero ipso facto la división de transporte deja de recibir los dos dólares que sí recibiría si el operador del lote 192 fuese otra empresa. En otras palabras, el simple hecho de que Petro – Perú sea dueña del oleoducto y de los activos del lote 192 no hace que pueda operarlo a menor costo. No hace, por tanto, que pueda conseguir una rentabilidad allí donde un operador privado no ve más que pérdidas. …Según estadísticas de la “OEFA”, el oleoducto sufrió más de 30 fugas en los últimos dos años y la verdad de la “MILANESA” es que Petro – Perú solo puede garantizar que el oleoducto vaya a tener menos derrames. Nadie en su sano juicio se atrevería a afirmar que Petro – Perú es una empresa eficiente y el derrame de miles de barriles de petróleo en el Oleoducto Norperuano durante los últimos años debido a la negligencia de bombear petróleo pese a no tener autorización solo confirma lo que resulta un secreto a voces…»A Petro – Perú SE LE DEBE TRATAR CON TODO EL RIGOR CON EL QUE SE TRATA A UNA EMPRESA PRIVADA, tanto en el respeto a las normas ambientales como en el uso de sus recursos”. Si no como se explica que el actual ministro de Energía, Francisco Ísmodes, ajeno a este debate y como si estuviera en la Luna, anunciaba la disposición de destinar S/ 190 millones para remediaciones ambientales en las cuencas del Pastaza, Corrientes y Tigres, daño cuya remediación debería corresponder a Pluspetrol, porque esa es la zona donde se ubica el lote 8 y el lote 192 (operado por Pluspetrol en el período 1999-2015). La verdad es que Petro – Perú no tiene un buen gobierno corporativo, no solo porque una misma persona ocupó los cargos de presidente del directorio y gerente general, sino porque contrató diversas consultorías cuyos resultados ayudaron muy poco a la empresa estatal. Requiere una reestructuración que implique la remoción del personal, tanto de alta dirección como trabajadores del sindicato que están allí desde hace varios años y no han encontrado la manera de mejorar la empresa, sino que se sirven de ella. También es importante contar con un directorio conformado por profesionales independientes expertos en el sector, algo que no se ve desde hace varios años¡¡…Actualmente la Federación Indígena Quechua del Pastaza (Fediquep) y la Federación de Comunidades Nativas de Corrientes (Feconaco), quienes estarían demandando remediación ambiental, debido a que se ubican en la zona de influencia de Lote 192. Como dije nadie en su sano juicio se atrevería a afirmar que Petro – perú es una empresa eficiente y si a esto le ayunamos el derrame constante de petróleo en el Oleoducto Norperuano, solo confirma lo que resulta un secreto a voces. Es la principal empresa que infringe graves delitos de contaminación cometidos en la Amazonía (tiene seis denuncias solo en los últimos tres años y 21 derrames en los últimos cinco). Por ejemplo en estos días se registra una fuerte contaminación petrolera y la producción petrolera en la región Loreto está prácticamente paralizada desde hace más de once semanas por los ataques al Oleoducto Norperuano, cuya infraestructura no puede ser rehabilitada por las persistentes medidas de fuerza de dirigentes de la comunidad de «Mayuriaga». El derrame no se generó por mano de algún comunero, sino por lo «OBSOLETO» del oleoducto que hace años ya ha debido ser renovado o reforzado para que no siga exponiendo la salud de los pueblos indígenas. Varias comunidades ubicadas en el cordón de Manseriche y Pastaza, están más que indignados y acaban de anunciar que tomarán acciones radicales a ver si ahí recién se preocupan en agilizar los acuerdos a los que llegaron hace poco con la PCM. Porque hasta la fecha no se ha concretado ninguno, tanto así que las fotos recientes muestran como la mancha de hidrocarburo sigue recorriendo la zona del río Apaga y río Rojo, matando animales y peces en su recorrido mortal. Con las lluvias constantes el petróleo regado corre más por los ríos. Cuántas aves y animales están tomando esa agua, contaminándose y muriendo. Si el petróleo llega al río Marañón, todo será mucho peor. Por todo ello soy de la opinión que «A Petro – perú se le debe tratar con todo el rigor de una empresa privada», tanto en el respeto a las normas ambientales como en el uso de sus recursos. En los últimos años se registraron grandes derrames de crudo en el Oleoducto Norperuano, operado por Petro – Perú y muchos de ellos inclusive no salieron a la luz pública¡¡¡