Perezosos bien  pagados

La haraganería más nefasta es el sello mayor de la gestión del serio, adusto y entrador Daniel Abugattás. Un año después de su gestión incolora y con tanto berrinche, niñería y parlamentarios delincuentes como el comeoro, la robacable, el proxeneta  y el presunto violador, queda en el presupuesto de los escaños la obra cumbre de la gestión que se fue: el ejercicio de la pereza, la sede del relajo, el lugar del vacilón sabatino y dominguero.  Es sabido que el hepático oficialista se fue dejando asegurada la pronto construcción de un centro recreacional para los señeros congresales, charlamentarios o simples calentadores de escaños.

No faltaba más. El  Congreso parió, por votación unánime, sin un voto en contra y ninguna abstención, la obra histórica de un sitio de esparcimiento para la comilona, la cerveceada o para celebrar el día del pollo y la pollada, el día del pisco y la butifarra, el año del chicharrón de cerdo o el milenio del lomo saltado. Más importante es tragar y chupar antes que dar las leyes que este país de excluidos requiere. Es decir, no hacer nada, hacer poco, hacer las cosas a medias, también les cansa, les agota, les estresa. Al borde del infarto o de otro mal,  tienen que descansar cada fin de semana en un lugar para ellos y ellas. Un lugar exclusivo, lujoso, con gangas, fiados o donaciones. Eso de que ese lugar es para los trabajadores congresales es un cuento. Y no chino, precisamente.

El peor parlamentario del mundo de ahora es un legislador alemán. Fue juzgado y sentenciado por dedicarse a robar papel higiénico. A ese nivel, el de la grotesca zampada del papel higiénico, queda la gestión congresal que acabó. El desprestigio de ese recinto, entonces, prosigue. El Congreso no puede seguir siendo ese desengaño perpetuo. El Congreso necesita recuperar su imagen legisladora, requiere de una soberbia reingeniería que lo modernice, que lo haga más mosca, para que gane la confianza de una población que cada vez respeta menos a los políticos.

1 COMENTARIO

  1. POLITICOS,raza maldita y que se regenera sin parar,descaro sin tapujos y los verdaderos malechores de este pais…menos mal que ahora existen instituciones que se dedican a denunciar a estos sabandijas,la tv,radio y periodismo independiente que sino estariamos peor que en España,donde les quitaron el aguinaldo a la gente mas necesitada para salvar dizque su nacion y adivinen a quien dieron el super archi millonario prestamo…a los bancos que viene manejado x gente como los congresistas…pero la esperanza de que el peru tenga legisladores realmente que trabajen x el pueblo no morira,solo espero que cuando lleguen no se vean obligados o manipulados x la gene del poder, si o no querido Fernando Olivera,de limpiar con tu escobita la basura,terminaste tu dentro del tacho y como tu hay tantos…….

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