Otra vez, Meléndez y compañía

Ante las declaraciones descabelladas de Fernando Meléndez Celis hay que ponernos coherentes. Ante las barbaridades del gobernador regional de Loreto hay que combatir el barbarismo. Si el señor Fernando Meléndez quiere convertir la geografía loretana en un circo hay que dejar que siga haciendo de payaso. Si el gobernador regional manda a sus operadores en las redes sociales a tergiversar la historia con referencias inexactas hay que mostrarla la verdad histórica y acudir a los que la escribieron y entienden. El gobernador regional de Loreto podrá lanzar las propuestas más descabelladas que se imagine y ahí estarán sus bustoparlantes para hacerle la comparsa. El señor Meléndez Celis intentará soplar el viento de su incapacidad y mediocridad a factores externos y se quedará en el intento. Porque la racionalidad, a pesar de los voceros de lo absurdo y populismo, siempre tendrá la razón, valga la redundancia.

La estudiosa de la historia y realidad amazónicas, Frederica Barclay Rey de Castro, quien ha escrito varios libros y cotidianamente piensa en Loreto y demás regiones de la Selva, ya ha dicho que esta propuesta del Estado Federal es “sacada de bajo de la manga y no tiene pies ni cabeza”. Frase lapidaria contra quien intenta hacer de la política regional solo verbo y nada de sustantivo. Porque, el problema de Loreto, entiéndase bien, no es solo la falta de recursos ni la escasez de proyectos integrales sino la miopía para saber conseguir lo que deseamos. No se puede acusar actualmente al “centralismo” de no mirar a Loreto. Para muestra solo un botón: El mismo día que Meléndez -con su nuevo “asesor” Eloy Pizango, sí el mismo personaje que se llama de izquierda y es uno de los más despiadados usureros de la región Loreto, el mismo que al paso del tiempo va llevar al FPL a peor situación que lo llevó el “556 votos” Menéndez- lanzaba desde Lima la alucinación del “referemdum” para la federalización, el Ministerio de Agricultura transfería un millón 500 mil soles para al Gobierno Regional de Loreto para financiar la ejecución del proyecto de inversión pública “Ampliación del Servicio de Catastro, Titulación y Registro de Tierras en las Comunidades Nativas de las Cuencas de los Ríos Pastaza, Tigre, Corrientes y Marañón, de la Provincia de Datem del Marañón y Loreto, Región Loreto”. Entonces, no es la falta de recursos ni atención sino únicamente la intención de un político que cree que está en campaña electoral permanente cuando ya debía dedicarse a gobernar con cierta decencia.

Y, claro, hay que evitar que la característica impregnada por Meléndez Celis a la gestión gubernamental contagie a los demás. Debemos lamentar, por ejemplo, que haya vuelto el sutepista Rafael Flores a participar de la comparsa de quien hace pocos días le dejó con la palabra en la boca en un acto público. Un poquito de dignidad a los dirigentes sindicales no los vendría mal. Y que hayan viajado a Lima con el rótulo de “representantes de Loreto” personajes que no tienen ninguna solo demuestra que el gobernador aún tiene recursos para costear pasajes a la capital con la condición que canten su música. Las justificaciones dadas por Pizango ante la ausencia de otras autoridades y otras instituciones no requieren mayor análisis. Que ellos sigan en lo que siempre hicieron, que los demás tenemos que seguir en lo nuestro.

LLAMADA Debemos lamentar, por ejemplo, que haya vuelto el sutepista Rafael Flores a participar de la comparsa de quien hace pocos días le dejó con la palabra en la boca en un acto público. Un poquito de dignidad a los dirigentes sindicales no los vendría mal.