¿Cómo imaginamos la floresta? Haciendo un flashback de cómo imaginan la floresta me remito a lo escuchado a lo largo de estos años en la floresta y fuera de ella. Hay una idea que es la más hegemónica. Para muchos romper el supuesto aislamiento de las poblaciones y recursos naturales de la floresta pasa con la construcción de carreteras, puentes, transporte intermodal, hidrovías. Esta idea viene desde lejos y es cíclica, cada cierto tiempo vuelve. Se aleja y vuelve otra vez. Por lo general, este tipo de opiniones más que discutirlas se imponen, en plan macho discursivo. Lo hago porque lo pienso yo, nada de debates y otras zarandajas. Esta idea autoritaria por lo general, no tiene en cuenta los posibles y graves daños directos y colaterales sobre las poblaciones que tanto hablan en su nombre y los recursos naturales. Esta idea del aislamiento amazónico empata con la idea que ésta está vacía y por lo tanto hay patente de corso para hacer lo que me da la gana. Recuerdo que los tiempos de los ochenta y en el gobierno del arquitecto Belaúnde –Sofocleto, gran humorista le decía Telaúnde- se le metió entre ceja y ceja construir una ciudad, geográficamente, en el centro de Perú como fue la llamada ciudad Constitución ¿nos acordamos de ella?, ¿qué fue de esa ciudad quimera proyectada por un urbanista? Lo que cuentan es que la bendita ciudad se convirtió en un determinado momento, lugar de narcotraficantes y hoy luce en abandono ¿alguien juzgó la inversión hecha por este iluminado de la construcción?, ¿acaso no fueron los recursos públicos que se invirtieron en esa pesadilla? Es que sobre la floresta no se discute, las retorcidas ideas se imponen sin reservas.