Sebastián Márquez Polanco, encargado en control de calidad de la remodelación del estadio Max Augustín, indicó que uno de los motivos por los que se demora la refacción del recinto es la falta del grass especial, que se fabrica en Italia.

Reiteró que cuando recepcionaron la obra por impuestos, no contaba con la evaluación sobre estado en que fue entregada. Entonces, el tiempo que no se preveó en la adquisición del césped, será el que demore.

“El requerimiento ya se hizo hace una semana, entre hoy (ayer) y mañana se concreta la obra. Hay dos condiciones para continuar, la pista atlética y el grass, esos requisitos son los que estamos solicitando a la empresa Consorcio Selva”, dijo.

Con estos requerimientos, a decir de Márquez, la obra se estaría extendiendo unos 150 días más y se estaría pronosticando su entrega para la quincena del mes de setiembre, de no presentarse mayores inconvenientes.