“HAN PILOTEADO A LA IGLESIA EN ESTA TEMPESTAD DEL COVID19”
El padre Miguel Ángel Cadenas, hoy convertido en Obispo de Iquitos, recordó a su antecesor Miguel Olaortúa, al leer una carta enviada desde Bilbao por Javier, hermano de quien fuera también Obispo de Iquitos, donde señala que por la pandemia no fue posible una presencia física, pero que la familia Olaortúa Lastra estaba muy alegre por la ordenación del nuevo líder del Vicariato Apostólico de Iquitos.
“Poco a poco me he ido reponiendo del susto, gracias a Manolo Berjón que con su cigarro va ikarando para que se ahuyenten los malos espíritus”, dijo Cadenas al recordar el momento que recibió la noticia de su nombramiento como Obispo de Iquitos.
La mayor parte de su intervención se tomó en reconocer el trabajo de los animadores cristianos, especialmente de Santa Rita de Castilla y Masusa. También destacó el trabajo de Leonardo Tello, director de Radio Ukamara. Además, reconoció el trabajo de los últimos meses del padre Miguel Fuertes, religiosas y religiosos y de Raymundo Portelli, quienes de alguna manera han piloteado a la Iglesia “en medio de esta tempestad del covid19”, dijo.
Pedro Diaz, murió ahogado en el rio Marañón a la altura de Maypuco. A Antonio Vela, en el pueblo de Urarinas. Ligia Saboya. Sonia Curitimari. A los de la Parroquia Santa Rita de Castilla. Leonidas Pinchi. Francisco Tello, animador de la comunidad de Santa Fe. Karina Guerrero de la capilla de la Visitación. Juan Manihuari, Héctor Moncada y Nancy Macahuachi, de Masusa, “me han ayudado a tener hilos fuertes y me han ayudado a tejer, en ellos veo el rostro de la Iglesia”, expresó en su corta intervención.
“El tejido cristiano está lleno de hilos de esperanza” fue lo que dijo al hacer una analogía entre el trabajo de quienes tejen materiales para su uso diario y el trabajo pastoral.
También mencionó a su padre (fallecido hace poco), a su madre, a su cuñado Félix, quienes siguen esta ceremonia por las redes sociales, a todos los periodistas que se han dado cita con nosotros y mencionó especialmente a Oraldo, “que Dios le haya recibido en sus benditas manos”, dijo.
No es posible mencionar a todos, se disculpó, pero nombró a Alberto Rodríguez, párroco de su pueblo. Domingo Natale y Fernando Joven, que le dijo, “no seas muy aventado, no lo comprendí hasta que navegaba por los ríos amazónicos”. Al P. Toño Lozán, Vicario Regional de los Agustinos y al P. Jesús Torres, de la Provincia de Sagún, España y, por supuesto, a Julián García Centeno.