Recomendación de médico Iracema Arévalo, en época de pandemia:

 

“A las mamás que están en el grupo de lactantes, les pedimos que no corten ese proceso, sólo deben tener en cuenta y practicar las medidas de higiene: lavarse las manos y si están tosiendo que se cubran la boca con una mascarilla. Pero no corten la lactancia materna”, recomendó la doctora Iracema Arévalo.

 La médico Iracema Arévalo, informó que los niños menores de un año no están siendo contagiados en gran proporción a nivel mundial. “En menores de un año no hemos visto que ese grupo se ponga grave, en general la información que tenemos parece que el COVID en los niños no presenta síntomas más que un resfrío y en un grupo muy pequeñito estaría haciendo un síndrome que se llama Kawasaki. Hubo casos reportados en el mundo y hubo muy pocos niños. Hay muy pocos niños a nivel mundial que se infectaron de COVID-19, en la gran mayoría de niños se presenta un resfrío y en los menores de un año es un número muy mínimo de contagiados”.

 En cuanto a los adultos mayores de 60 años dijo que es un grupo vulnerable, pues el sistema inmunológico, después de esa edad, tiene más riesgo de complicarse, pero se vieron casos de personas de 90 años que pasaron el COVID como un resfrío y luego se recuperaron.

 “En el mundo ideal deberíamos tener a los abuelitos en un sitio o en un cuarto aislados y que no tengan contacto con las personas, pero eso se está haciendo muy difícil, no estamos en un mundo ideal entonces, deben lavarse las manos, el distanciamiento físico de los abuelitos, intenten minimizar la interacción entre los nietos y los abuelitos. Se debe evitar la automedicación, porque es un riesgo automedicar a los abuelitos, pues luego no se van a morir por COVID, sino por un ataque cardiaco”, recomendó la médico Irasema Arévalo.

 Dio a conocer que, a pesar de esta pandemia, debemos priorizar también la vacunación. “Vemos que a nivel mundial nadie se está yendo a ponerse las vacunas, luego vamos a tener casos de sarampión, varicela, neumonía, neumococo. Por ejemplo, la vacuna