CONFESIÓN DE BARATA EN CURITIBA

Por Gustavo Gorriti y Romina Mella.-

Pese a que no concluye aún la intensa segunda jornada de declaraciones del ex jefe de Odebrecht en Perú, Jorge Barata, ya es posible hacer un resumen analítico sobre el significado de sus principales declaraciones.

Ello permite identificar los hechos incontrovertibles de importancia que reveló la confesión de Barata, describir el nuevo escenario que configuran y el horizonte estratégico que se abre a la investigación.

Habrá, sin duda, escaramuzas entre versiones opuestas y competitivas a cargo de los abogados y propagandistas de diversos intereses y posiciones. Pero, bien ordenados los principales puntos en la declaración del ex jefe de Odebrecht en el Perú, el resultado es inequívoco. Vamos a él.

Uno de los puntos principales del interrogatorio fue establecer si Luis Nava recibió o no sobornos de Odebrecht. Si utilizó o no a Miguel Atala como testaferro; y si el soborno tuvo o no relación con el avance de obras como IIRSA Sur y el Metro de Lima. Si la respuesta era positiva, restaba explicar cómo y cuándo se acordó el sistema de coimas.

Todo eso fue aclarado así por Barata:

  • Invitado a la casa de playa de Nava (a quien conoció a través de Luis Alva Castro), siendo ya presidente Alan García, Barata declaró que su anfitrión, Nava, le dijo que sabía que Odebrecht había pagado sobornos a Toledo.
  • ¿Cómo lo supo Nava? Según declaró Barata hoy, Nava le dijo que supo de los pagos de coimas a Toledo porque Yosef Maiman había buscado a Alan García para contarle la historia de esos pagos. Este solo hecho añade una nueva perspectiva al conocimiento del caso.
  • Barata dijo, en la declaración de hoy, haberse sentido tranquilo sabiendo que, pese a conocer el pago de sobornos a Toledo, García no había tomado ninguna represalia contra Odebrecht.
  • Hubo más. En esa reunión, Barata acordó pagarle a Luis Nava una coima de $3 millones de dólares para garantizar la continuación sin problemas de los trabajos en IIRSA Sur y para ayudar a Odebrecht a conquistar nuevos proyectos.
  • Barata hizo el acuerdo sabiendo que Luis Nava no tenía ninguna capacidad de influenciar sin usar el nombre de Alan García. Como secretario del presidente Nava no tenía otra función ejecutiva que no fuera el servicio al Presidente.
  • Su análisis probó ser correcto. Hasta el momento de pagar a Nava, indicó Barata, Odebrecht tenía algunos problemas con la entonces ministra Verónica Zavala en los procesos vinculados con IIRSA Sur. Luego del pago, sintió un esfuerzo grande por hacer todo fácil y eficiente para la empresa. Incluso, refirió Barata, la ministra Zavala viajó en auto para supervisar la ejecución de las obras en IIRSA Sur.
  • Barata enfatizó que Nava solo podía hablar con un ministro usando el nombre del Presidente.

Toda la historia de coimas empezó, entonces, en aquella reunión en la casa de playa de Nava a la que también asistió otro importante protagonista del caso: Miguel Atala.

¿Cuál era el poder real de estas dos personas, basado en qué? ¿Fue Nava, en realidad, “Chalán” y su hijo José Antonio, “Bandido”?

Las respuestas fueron inequívocas.

  • Según Jorge Barata, Luis Nava y Miguel Atala fueron los ‘Maiman’ de Alan García.
  • Barata confirmó que ‘Chalán’ fue el seudónimo
  • ¿Por qué ‘Chalan’? Barata dice que le puso el alias porque Nava era “domador de caballos de paso” y a la vez era el que “cuida al caballo loco”, en referencia al expresidente Alan García.

de Luis Nava en los registros del Sector de Operaciones Estructuradas (SOE) de Odebrecht.

  • Barata reveló que José Antonio Nava Mendiola fue identificado como ‘Bandido’ por el SOE. Pero dijo además que este, Nava Mendiola supo del pago de sobornos a su padre, Luis Nava.
  • ¿Por qué ‘Chalan’? Barata dice que le puso el alias porque Nava era “domador de caballos de paso” y a la vez era el que “cuida al caballo loco”, en referencia al expresidente Alan García.

En cuanto a Miguel Atala, Barata ratificó que él actuó como testaferro de Luis Nava para que este pudiera recibir un millón 300 mil dólares en la cuenta que la empresa de gaveta panameña Ammarin Investment abrió en la Banca Privada de Andorra.

Sobre  Alejandro Toledo, Jorge Barata informó que Odebrecht no solo pagó los 27 millones de dólares hasta hoy revelados en sobornos a Toledo por la IIRSA Sur, sino 31 millones de dólares en total.

El exsuperintendente en Perú dijo que 27 millones de dólares en sobornos fueron pagados a Toledo a través de Maiman y otros 4 millones de dólares sin ese intermediario. Barata adelantó que los documentos que prueban el pago de esos 4 millones están en el paquete de 4 mil folios de registros del Sector de Operaciones Estructuradas, que entregará a las autoridades peruanas.

Jorge Barata, entonces superintendente de Odebrecht en el Perú, posa junto al mandatario Alejandro Toledo durante la inauguración de un puente en Acre, en 2006, como parte de las obras de la carretera Interoceánica.

Barata recordó que Toledo le increpó en una ocasión: “¡Oiga Barata, paga carajo!” luego de un retraso en el desembolso de las coimas. Las cuotas de los sobornos a Toledo se depositaron tres o cuatro veces al año, de acuerdo con el testimonio del exjefe de Odebrecht en el Perú. El último desembolso fue en 2010.

Barata no habló todo lo que sabe, pero sí bastante. En los días siguientes habrá nuevas revelaciones, pero las actuales ya han cambiado decisivamente el escenario. (IDL-Reporteros)

¿Qué le queda a los Nava, a los Atala y a otros acusados a partir de ahora? Probablemente pensar muy en serio en una colaboración eficaz antes de que un nuevo conjunto de evidencias la haga innecesaria para la Fiscalía.