Antes de traicionar a alguien primero fíjate en lo que esta persona ha hecho por ti. Fíjate en sus actos que te ha demostrado. Si ha estado contigo en los buenos y en los malos momentos, y en especial si esta persona, a pesar que una vez lo has defraudado, te ha renovado nuevamente esa confianza. Esas cosas deberían tomar en cuenta muchos antes de apuñalar a quien le brindó la mano cuando otros no lo hicieron.
Si bien La RAE define a la Lealtad (no definiremos el concepto extenso de lo que implica esta palabra, ya que implica tocar aspecto filosóficos) como el cumplimiento de lo que exigen las leyes de la fidelidad y las del honor y hombría de bien. A pesar que muchos la conocen no la aplican en su día a día. Y hacen uso de esta palabra como un concepto vago que solamente se tiene que demostrar un par de minutos, horas, días, semanas o hasta escasos años, hasta que aparezca el momento oportuno para dejarlo de lado.
Digo ello porque últimamente en la política peruana se la está desconociendo, a pesar que muchos partidos políticos lo tienen como una ley imperante dentro de sus instituciones políticas.
Un claro ejemplo palpable y mirificable es lo que viene aconteciendo dentro del partido político Fuerza Popular, en el cual algunos de sus integrantes vienen apuñalando a este partido político a pesar que este les dio el espacio y la facultades de poder realizar sus actividades como funcionarios en pro de la ciudadanía. Desde golpearlo hasta hacerlo añicos es lo que algunos congresistas naranjas han demostrado en todo este interín desde que asumieron su rol como funcionarios del estado, como congresistas de la República del Perú por el partido político Fuerza Popular.
¿Será acaso que, como lo dijo la ex parlamentaria fujimorista Patricia Donayre, hoy pasada a las filas del oficialismo, o como lo dijo el ex parlamentario naranja Francesco Petrozzi que la lealtad se la demuestra al ciudadano y no al partido político? O ¿acaso ellos no recuerdan que si no fueran por dicho partido político nunca hubiesen llegado a ocupar el curul que ostentan ahora?
Claramente este acontecer deja mucho que pensar respecto a la lealtad partidaria de aquellos que pretenden hacer política, o ¿acaso serán meros oportunistas que solamente buscan llenar sus bolsillos y de aquellos que aportaron en su campaña?
Yo solamente sé que la lealtad se demuestra y no se anda pregonando. Los hechos demuestran más de lo que uno dice y eso es lo que habla de uno mismo.