El Colegio Médico del Perú acaba de publicar el libro “Manual de musicoterapia” del Dr. Segundo Armas Torres, del cual extraigo algunos conceptos.
Terapia es curación o ayuda. La musicoterapia es una disciplina que utiliza la música y las actividades relacionadas con ella (canto, biodanza, etc) para efectuar cambios positivos en el funcionamiento físico, psicológico, cognoscitivo o social en personas con problemas de salud y educativos.
Su práctica se da en 4 áreas: promocional y preventivo, asistencia terapéutica, rehabilitación y desarrollo personal. Existen varios tipos de musicoterapia, a saber: canto, improvisación musical con instrumentos terapéuticos, biodanza, audición pasiva y otros.
Esta ciencia tiene varias indicaciones y las más frecuentes son el estrés, la educación de niños y jóvenes, tratamiento de niños autistas, manejo de enfermedades psicosomáticas, tratamiento de dolores leves y crónicos, rehabilitación de drogadictos y alcohólicos, algunas enfermedades geriátricas como el Alzheimer, mejorar el ambiente de Unidad de cuidados intensivos (UCI), viéndose respuesta en pacientes con coma.pacientes en coma.
Para realizar todo esto primero se debe confeccionar una historia clínica musicoterapéutica donde se consignan, entre otras cosas, datos del paciente, sus gustos musicales, gustos musicales de la familia. La base científica de esta ciencia se basa en que las emociones producen cambios cerebrales e inmunológicos positivos.
Tal vez una de sus aplicaciones más mediáticas, pero no por ello menos importante, es en la estimulación prenatal y temprana. El sentido que más se puede estimular en una persona, aún antes de su nacimiento, es el auditivo y de cómo se desarrolle este vínculo intrauterino es crucial para el ulterior desarrollo psicofísico de una persona. La estimulación prenatal es un trabajo que empieza a realizarse a partir de los 4 meses de gestación, cuando el feto ya tiene desarrollado su aparato auditivo de tal modo que capta los sonidos que hay en la atmósfera intrauterina, los latidos del corazón de la madre, el ruido de la sangre que circula por la placenta, la voz de la madre, los sonidos de afuera. La técnica se puede empezar antes para que la madre empiece a relajarse con la música.
El feto reacciona muy positivamente a los efectos de la música si ésta les significa algo, lográndose favorecer el vínculo entre madre y él. Se busca que la madre acaricie su vientre en las mejores condiciones psicológicas posibles para que transmita su tranquilidad y sentimientos a lo que lleva dentro. Durante el primer trimestre se han visto buenos resultados con música clásica (Mozart, Grieg, Vivaldi). En el segundo trimestre se utiliza más música espiritual y se motiva a los padres hablar con el feto con frases cortas y cariñosas. En el tercer trimestre se incorporan instrumentos musicales (guitarra, flautas, sonajas).
La musicoterapia tiene también diversas aplicaciones y métodos en educación especial, autismo infantil, síndrome de Down, parálisis cerebral, niños con padres separados, en adolescentes, en colegios públicos.
Ahora bien, lo bueno, no controlado, puede ser dañino. Hay estudios que comprueban que canciones con letras degradantes fomentan precocidad sexual tanto en hombres y mujeres de distintos países y niveles socioeconómicos, por lo que, muchos especialistas, recomiendan a los padres escuchar la música que oyen sus hijos para poder hablar con ellos acerca de su contenido y poder orientarlos en su comportamiento y valores.
Queda mucho más en el tintero, pero que emocionante saber que un arte que nos acompaña todos los días, si sabemos utilizarlo, nos puede hacer mejores personas.