Escribe: Percy Vílchez Vela
El inconveniente de la basura tiene su historia en esta ciudad. Comienza siendo un mal servicio de parte de los encargados de la limpieza. Sigue con una incapacidad impresionante para elegir correctamente el botadero de basura o relleno sanitario. Continúa con el mal del ciudadano que saca su basura a cualquier hora, sin fijarse en la hora del paso de los camiones recogedores, de la labor de la baja policía. Esa costumbre comenzó hace tiempo y sigue hasta el día de hoy. El problema de los desperdicios no solo son entonces las empresas deficientes que pese a cobrar no hacen bien su labor, sino también de los mismos ciudadanos de ambos sexos que no cumnplen con el horario fijado. Así se contribuye a tener una urbe perpetuamente sucia.
La Bota elegante era una afamada zapatería que se levantaba en la calle Próspero y tenía su clientela entre lo más graneado de la ciudad. En la vereda de ese comercio de pronto, cualquier día de 1942, fueron acumulados como una burla a Iquitos, a la ciudadanía, a la salud mental y física, cajas, cartones, maderas, latas, botellas, shunchos, desperdicios domésticos y otras cosas ubicados dentro del rubro de desperdicios urbanos. Esa zapatería no hizo entonces honor a su nombre y siempre hacía lo mismo, siempre sus propietarios o sus trabajadores tenían la mala costumbre de acomodar afuera la basura del día.
En ese entonces, hace 73 años, había un interesante dispositivo edil que a la letra decía que cada habitante de la ciudad era responsable de la limpieza de su área, de su vivienda. Es decir, el morador de aquella época no podía alegremente acomodar su basura en su lugar y cruzarse de brazos esperando que alguien recogiera esos desperdicios. La multa a todo aquel que cometiera una infracción a ese dispositivo era el castigo que se imponía, pero a los señores de la Bota Elegante nunca les pasaba nada. Por algo debe haber sido semejante exoneración. Y debido a ello abusaban al poner la basura en la vereda de la zapatería.
En otros lugares de la ciudad de entonces, los comercios y establecimientos tenían la costumbre de acomodar sus desperdicios en las veredas a las esquinas. Debido a muchos factores la multa nunca llegaba y se hizo una costumbre eso de poner la basura afuera sin preocuparse de los de la limpieza que de todas maneras tenían un horario definido para recoger los desperdicios. Nunca. Los otros vecinos también adquirieron esa costumbre y así la ciudad a cualquier hora siempre tenía la basura expuesta. Las multas no fueron aplicadas como debió ser y no se pudo nada contra los que contribuían a afear la ciudad mostrando los desperdicios como si nada. . Así se dio pase libre a una perniciosa manera de vivir en Iquitos. –
La Bota elegante cerró sus puertas sin pena ni gloria. Pero la basura acumulada por los mismos vecinos es hoy por hoy uno de los más graves inconvenientes de la ciudad. En tantas partes, en cualquier parte, prácticamente, amaneen y anochecen cerros de basura, como si la empresa recogedora de basura no existiera. La gente no respeta el horario de recojo como si tuviera urgencia por deshacerse de sus desperdicios. Un caso, por ejemplo, es el del permanente montículo de basura que vive y trafica en la calle Cahuide. Sucede que vecinos de las otras calles, sin importarles la hora del paso de los camiones, la protesta de los que viven por allí, desfilan a cualquier hora a arrojar sus desperdicios en ese lugar. Día y noche, como hacían los dueños y trabajadores de la Bota elegante y de otros comercios.- .
En otras partes de la ciudad, en varias partes ciertamente, ocurre lo mismo. La basura siempre está expuesta. Se puede decir que en ningún momento Iquitos está limpio porque abunda la basura amontonada en esquinas o en otros lugres. Esa costumbre tiene décadas. Es una de las herencias nefastas que viene del pasado para perturbar el presente. El eterno inconveniente de la basura también es un asunto del ciudadano (na). Una posible solución sería resucitar ese dispositivo edil que multaba al morador que pusiera su basura afuera, que no limpiara sus dominios. Pero en esta ocasión se debería hacer cumplir la multa