* “En esta marabunta de elementos para escribir, se tiene que conocer por lo menos lo básico. Son pocas las instituciones públicas que cuidan el lenguaje escrito (…) estas limitaciones también se hallan en los escritores, que no han tenido una formación para ello (…)”, escribe José Rodríguez Siguas.
El escritor José Rodríguez mostró una imagen de la fachada del Instituto de Investigaciones de la Amazonía Peruana donde, según su explicación, está mal escrita la palabra amazonía porque no se colocó la tilde.
El autor de “Entre juegos y fugas” y “Distancias” (de próxima aparición) explicó de esta manera esos errores en la redacción.
El escribir nuestro de cada día
De las competencias comunicativas, la escritura es la más compleja y la que más se tarda en desarrollar. Y no solo en el ámbito de los estudiantes de EBR, sino también en estudiantes de posgrado. Es llamativo, puesto que hoy en día hay una exigencia mayor para desarrollar esta competencia (la tecnología ayuda en parte en resolver ciertas carencias). El espacio letrado escrito ha sido copado por todo aquel que quiere expresar algo, o por una necesidad académica. Y seguro eso no va a cambiar. En esta marabunta de elementos para escribir, se tiene que conocer por lo menos lo básico. Son pocas las instituciones públicas que cuidan el lenguaje escrito. Se nota por lo menos el interés de mejorar cada día en ese aspecto. Pero en la mayoría de casos esto no importa, parece.
Estas limitaciones también se hallan en los escritores, que no han tenido una formación para ello, pero que cada vez aumentan más y más. No hay ninguna exigencia para publicar, dependerá exclusivamente del autor (salvo en el ámbito científico que tiene sus propias métricas, y en una que otra editorial). Estos libros son validados por docentes y periodistas. Y lo hacen o porque no tienen criterios claros o por compasión (cierta crítica ha señalado que la publicación misma es un mérito).
Una reflexión final: en la etapa escolar (secundaria) se debe trabajar no solo la producción de textos literarios, sino también académicos (estudiantes que van a estudiar en Lima la universidad tienen que superar este escollo). Por lo menos que al egresar tengan conocimientos sobre el parafraseo (tan necesario en la redacción de trabajos de investigación); el dominio, siquiera, del formato APA, por lo menos en las citas y referencias (ya sea manual o con el uso de gestores bibliográficos, para eso se debe sortear la falta de aparatos tecnológicos en los estudiantes y hasta en los docentes). Conocimientos de ortografía y gramática, tan caros en los docentes, hasta del área de Comunicación.
Complicado todo, pero bueno, a seguir adelante.
(En la imagen, Amazonía debe llevar tilde)