Cuerpo fue recibido por el general PNP Carlos Chong
Familia pide que investigación continúe. Los restos mortales del SO2 Anthony Santillán Ahuanari (31) llegaron la noche del miércoles a Iquitos. El velorio se realizó en su vivienda en el distrito de San Juan Bautista. El miembro de la PNP será enterrado esta mañana.
Hoy a las 10:00 am será enterrado el suboficial de segunda Anthony Santillán en el campo santo Jardines del Edén en el kilómetro 09 de la carretera Iquitos – Nauta en el distrito de San Juan Bautista.
Sus restos llegaron al puerto ENAPU la noche del miércoles a bordo de una embarcación fluvial. Hasta el lugar llegaron efectivos policiales liderados por el jefe de la IV macro región policial Loreto general PNP Carlos Chong Campana, quienes colaboraron en el traslado del ataúd que contenía al policía.
Antes de salir del puerto, llegaron representantes del ministerio público quienes ordenaron su traslado a la morgue central para unos exámenes antes de entregarlo a sus familiares.
Antes de las 3:00 am fue llevado a su vivienda ubicado en la calle Miraflores en la comunidad campesina San Juan de Miraflores en la zona sur de la ciudad. Al interior y exterior de la propiedad fueron acompañados por una enorme cantidad de familiares, amigos y conocidos.
El señor Ramiro Santillán expresó una vez más su tristeza y pidió que no fatigue la labor de investigación, que además de determinar el motivo por el cual su hijo fue asesinado, también se dé con el paradero del asesino.
Ministerio Público dispuso la realización de necropsia de ley
El miércoles en horas de la noche, personal fiscal de la Quinta Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Maynas, en conjunto con personal de Criminalística de la Policía Nacional del Perú, recibieron en el puerto de ENAPU, el cuerpo sin vida del SO2 PNP Anthony Santillán Ahuanari, asesinado el martes 11 de febrero en la ciudad de Tabatinga – Brasil, frontera tripartita con Perú y Colombia.
También se hizo llegar a la autoridad nacional, la Declaración de Muerte y Certificado Médico de Fallecimiento, expedidos por el Ministerio de Salud de Brasil, los mismos que señalan que la muerte del efectivo policial se produjo por proyectil de arma de fuego.
Conforme a lo establecido en nuestra normatividad, cuando se trata de muertes violentas, es necesario se practique la necropsia; entonces, como las autoridades brasileñas no practicaron dicho acto, procede su cumplimiento por la División Médico Legal de Loreto, a cuya Unidad Médico Legal fue trasladado el cadáver para tal propósito. Continuándose, de este modo, con los actos de investigación urgentes e inaplazables que el caso amerita.