Pasaron cuatro décadas de explotación petrolera, pero las comunidades indígenas de influencia continúan careciendo de los servicios de salud, educación, saneamiento e infraestructura.

Anderson Chino, presidente de la Organización Regional Indígena del Alto Pastaza (Oriap) cuestionó que el gobierno hasta el momento no priorice la remediación de pasivos ambientales que generó la contaminación en el lote 192.  

“Ya estamos negociando a pesar de que no estamos subsanando los territorios de las comunidades. Esto afecta a los pobladores que vamos a permitir 30 años más tomando agua contaminada ¿cuándo el Estado lo va a remediar?”, manifestó. 

Cuestionó que se haya atendido con prioridad el derrame de petróleo en el mar de Ventanilla, pero no se haga nada por remediar la contaminación en la Amazonía Peruana y no se atienda las exigencias de la plataforma de lucha de pueblos afectados por las actividades extractivas.

“Todos somos peruanos, porque abandonamos a las comunidades, pedimos al Estado que nos atienda, siempre nos han marginado”, dijo. 

También espera que se destine el Fideicomiso de 2.5 que se ofrece, para que se cubra el perfil de principales proyectos como la implementación de un colegio.