La situación en la Cuenca del Bajo Tigre sigue siendo crítica, con un paro de 23 días que ha intensificado el bloqueo del río. Jerí Nashnate Tamani, presidente de la Federación de Comunidades Nativas del Bajo Tigre (FECONABAT), denunció que a pesar de las flexibilizaciones para permitir el tránsito de embarcaciones y dar muestras de buena fe, las negociaciones con el gobierno se han visto obstaculizadas por la inclusión de «falsos dirigentes» en las reuniones. Explicó que la PCM había prometido una mesa técnica para resolver el conflicto, pero las últimas reuniones se han realizado con representantes no acreditados, lo que ha llevado a un nuevo endurecimiento de las medidas de protesta.
Tamani, quien representa a 17 comunidades afectadas, expresó su frustración con la gestión actual, señalando que las autoridades locales, incluidos el alcalde del distrito del Tigre y otros funcionarios, han facilitado reuniones sin consultar adecuadamente a los verdaderos líderes de las comunidades. «El malestar de los apus es palpable, y la situación ha vuelto a un punto muerto debido a la falta de representación legítima en las negociaciones,» indicó. En respuesta, las comunidades decidieron reactivar el bloqueo del río hasta que se resuelva la situación de manera satisfactoria.
El presidente de FECONABAT hizo un llamado urgente al gobierno para que convoque una mesa técnica de diálogo con los verdaderos representantes de las comunidades y que se priorice la aprobación de un plan de desarrollo integral. «Queremos igualdad en el acceso a servicios básicos como agua potable, salud y educación, y una resolución ministerial que respalde nuestras demandas,» afirmó Tamani.
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