N.R:

Roberto Reátegui es productor del noticiero más exitoso de la televisión nacional. Pero también produce novelas. Y buenas. La última de ellas es “El fantasma del Amazonas” que se presentará el próximo viernes 27 de febrero en el Centro Cultural Yrapay con los comentarios del padre Joaquín García Sánchez. A raíz de esta obra la prensa nacional ha dado singular cobertura. Sin embargo, la prensa local no ha dado ese tratamiento a una novela que debería ser de lectura obligada para todos y todas y a un autor que tendría que recibir el reconocimiento de todos y todas. Reproducimos el reportaje que publicó la revista CARETAS hace algunas semanas. Ah, el libro está a la venta en SBS Librería de Iquitos ubicada en la segunda cuadra de la calle Nauta.

GORRO
El periodista Roberto Reátegui acaba de publicar ‘El fantasma del Amazonas’, una novela de aventuras ambientada en el contexto del primer viaje de un barco peruano desde la Amazonía hacia el Callao. Él, además, es autor de ‘Siete pelícanos’, ‘Retro’ y ‘Diva’. En esta entrevista, entre otras cosas, confiesa que la mayor mentira que dijeron sobre él es que le sacó la vuelta a su primera esposa con la que sería su segunda esposa.

TEXTO
–¿Cómo pasas tus días?

–Trabajando, leyendo, escribiendo y tomando café.

–Qué te motivó a escribir ‘El fantasma del Amazonas’?
–Hace 30 años me contaron la historia del viaje que en 1916 hizo el vapor ‘Yurimaguas’ desde Iquitos hasta el Callao. Me quedaba la deuda de convertir ese relato en una novela de aventuras. Y en el camino me encontré con otras historias que se vinculaban con ese viaje y su tripulación.

–¿Qué significa el periodismo para ti?
–Querer saber todo y querer contarlo. Tratar de conocer la verdad aunque aún no se le haya empezado a rodear de mentiras. Intentar enterarte de más cosas que los demás y tratar de ser el primero en decirlas porque seguramente les interesarán.

–¿Qué estás leyendo en estos momentos?
–‘De vidas ajenas’, del francés Emmanuel Carrère.

–¿Cuál es tu logro más importante a nivel profesional?
–Llevar más de 30 años trabajando en televisión y tener las mismas ganas que al principio. Es imposible aburrirse.

 –Un defecto, una virtud.
–Timidez y parquedad, una combinación fatal. ¿Virtud? ¿Qué es eso?

–¿En qué profesión no te hallarías nunca?
–Minero de socavón: le tengo pánico a la oscuridad.

–¿Cuál ha sido tu cambio de look más radical?
–Afeitarme una barba que llevaba por cerca de 10 años. Cuando regresé a casa, mi hijo preguntó asustado: ¿de parte de quién?

–¿Cuál es el objeto que más tiempo lleva en tu mesa de noche?
–Una torre de libros y un separador de páginas que ya debería cambiar.

–¿A qué le temes?
–A la oscuridad y al encierro. A los túneles, a los ascensores atascados, a meterme en el aparato de la resonancia magnética. Y, por supuesto, a la muerte.

–¿Qué costumbre debería quedar definitivamente en desuso?
–Que las mujeres se cambien de apellido al casarse. O que sean las señoras “de”.

–¿Qué ventajas tendría ser del sexo opuesto?
–Ver las tonterías que a veces hacemos los hombres.

–¿Cuál ha sido el papelón más grande de tu vida?
–Emitir un flash de resultado electoral equivocado y dar por ganador, en un momento político muy importante, al grupo que perdió. Un error así se paga: al día siguiente fuimos titular –con repetición y tono de sarcasmo– en el noticiero de la competencia.

–¿En cuál de los siete pecados capitales caíste últimamente?
–¿Tomar harto vino picoteando panetones se considera gula?

–¿Qué consejo, lección o enseñanza quisieras dejar a tus hijos?
–Que sean lo que quieran ser y que no hagan caso a quienes les digan que no. Aunque seamos sus padres.

–¿Cuál es el mejor lugar para hacer el amor?
–La cama, siempre. Lo demás son alardes.

–¿Qué has dejado de hacer por temor al qué dirán?
–Publicar un libro. Con ‘El fantasma del Amazonas’ ya van cinco.

–¿De qué huachafería has sido testigo últimamente?
–Eso de jugar a la comidita en algunos restaurantes de moda. Pagar una cuenta exorbitante y luego decir que es “lo máximo”

–¿Cuál ha sido tu gran travesura de infancia?
–Esconderme los viernes en los baños del colegio para no tener que ir a la misa semanal. Medio monse, ¿no?

–¿Cuál es la peor mentira que han dicho de ti?
–Que le saqué la vuelta a mi primera esposa con la que sería mi segunda esposa. De esas mentiras que hacen más daño a quien menos le toca. Dicha y repetida en la tele y en varias primeras planas.

–¿Qué titular te gustaría leer mañana en los diarios?
–¡Arriba Perú! ¡Somos campeones mundiales de fútbol! Llegará el día, más o menos en el año 3000.

–¿Qué moda debería volver?
–Los sombreros, para hombres y mujeres.Y también escribir correctamente, que ha pasado de moda.

–¿Con quién te gustaría estar en una isla desierta?
– Con la mujer que amo, y ella lo sabe. ¿Lo sabes, no?

–¿Conoces alguna celebridad? Cuéntanos la anécdota.
– Estuve con Keith Richards de los Rolling Stones, hombro con hombro, en una islita italiana…¡Y no lo reconocí, hasta cuando ya se había ido!

–¿En qué o quién te reencarnarías?
–En el primer hombre que en unos años llegará a Marte.

– En el día del juicio final, ¿irías al paraíso, al purgatorio, o al infierno?
–Al infierno, muy probablemente. Y si me mandan a otro sitio me escaparía allí a curiosear.

– Si te quedara un día de vida, ¿qué harías?
–Desayunar con mis hijos y navegar con la mujer que quiero hasta que llegue la noche.

–¿Qué es lo más loco que has hecho por amor?
–Agarrar un avión para tomarme un trago con una chica que estaba de viaje y regresarme en el siguiente vuelo.