El debate presidencial entre Pedro Pablo Kuszynski Godard y Keiko Sofia Fujimori Higuchi se realizó ayer en la localidad de Manacamiri, provincia de Maynas. Ambos contendores arribaron en avión directamente al local comunal donde les esperaban las cámaras de televisión contratadas para el evento. En primera fila estaban los parientes prófugos de Keiko Sofía quienes deben una millonada a los peruanos. En la otra fila estaban los que fueron beneficiados por PPK en los años que estuvo en el gobierno. Luego venían los eternos ayayeros de ambos candidatos. El debate comenzó a los 8 de la noche, justo en el momento en que quitaban corriente eléctrica en dicho poblado.
En plena oscuridad ambos contendores se dieron con todo y no respetaron nada, ni sus mismas firmas que buscaba un pacto ético electoral. Keiko Sofia, quien tenía una ligera ventaja sobre PPK, ninguneó el programa de gobierno de su rival. Por su parte, PPK dijo que el que estaba detrás de la campaña era el innombrable Alberto Fujimori. Desde el fondo del auditorio, el ingeniero saltó para decir que él era inocente y que nada tenía que ver con la jornada de su hija. Como es sabido, gracias a los buenos favores de Hernando de Soto, Fujimori ha salido de prisión y viaja detrás de su hija. Todo el mundo sabe que don Alberto quiere postular para la presidencia de la república el 2021.
El debate terminó cuando el animador no pudo controlar los dimes y diretes que se lanzaban ambos candidatos. Ambos candidatos casi llegan a los golpes luego de la discusión sobre la seguridad ciudadana. Finalmente, el inefable Jurado Nacional de Elecciones tardías, retiró de la campaña a PPK y Keiko Sofia por no respetar las reglas de juego de la jornada de las ánforas. Demás está decir que los expulsados han decidido presentar sus reclamos ante el lejano tribunal de La Haya.
