Percy Vílchez Vela
En los lugares más insólitos de la ciudad de Iquitos aparece, de pronto, un hombre provisto de una bolsa de plástico. De inmediato, se encuentre donde se encuentre, el mismo comienza a juntar los desperdicios que hay en los alrededores. Cuando llena su envase se va de frente a dejarlo en el relleno sanitario. Luego agarra otra bolsa y prosigue limpiando la basura circundante. El hombre ya tiene su edad y han pasado varios años desde que comenzó a hacer uso de la bolsa salvadora. Eran los tiempos en que Gerson Lecca era alcalde de Belén. En pleno mandato, luego de varias jornadas de limpieza de la basura con su pala, su carretilla, su rastrillo y su uniforme de la baja policía, realizó un paseo familiar. Nada hacía sospechar que esa salida iba a ser decisiva en su vida. Todo estalló cuando descubrió que la plaza donde estaba paseando era un lugar atacado por los desperdicios.
El entonces alcalde no supo que hacer. Era para él una agresión que estuviera rodeado de desperdicios. En su desesperación lo único que hizo fue comprar una bolsa de plástico en la bodega de la esquina. Luego comenzó a juntar todo desperdicio que hubiera en esa plaza. Era ya el alcalde y a partir de ese día no dejó de andar con su bolsa de plástico dispuesto siempre a juntar los desperdicios. El tiempo pasó desde entonces y se volvió una costumbre que Gerson Lecca apareciera en todo momento con su bolsa de plástico. Una vez que dejó la alcaldía todo el mundo pensó que iba a descansar de su obsesión por mantener limpio el lugar donde estaba. Pero todos estaban equivocados. Porque el citado siguió yendo a todas partes con su bolsa de plástico al hombro
En estos últimos tiempos el referido radicalizó el uso de bolsas de plástico para proceder a una limpieza más efectiva. Es común entonces descubrirle por las calles cargando varias bolsas a la vez, lo cual le da un aspecto de carguero exagerado. A él no le importa ese parecido y está dispuesto a cargar más bolsas de plástico y de esa manera intentar acabar con el triste espectáculo de los desperdicios en cualquier parte.