[ESCRIBE: Jaime Vásquez Valcárcel].
Una pregunta inicial deberían hacerse los que creen que el debate convocado por la Universidad Científica del Perú será determinante para que los electores decidan su voto este 5 de octubre: ¿alguna vez se ha decidido el triunfo o derrota de un candidato en la región Loreto o provincia de Maynas por el desempeño en un debate? La respuesta es, a diferencia de lo que sucede en otras partes del país, es negativa. Los factores que llevan a esa conclusión son diversos y los datos también.
Sólo para remitirnos a las dos últimas elecciones en Maynas. Cuando el pueblo de esta provincia dio el 24.3% de votos –que tampoco es una mayoría abrumadora- a Salomón Abensur Díaz y lo convirtió en Alcalde –en uno de los pocos casos donde el hijo sucede al padre con años de distancia- no fue necesario ningún debate y fue una consecuencia lógica de participaciones consecutivas del hijo de Joaquín Abensur Araujo. Qué factores contribuyeron a su elección será de una duda permanente. La promesa del puente sobre el río Nanay, la ejecución del gasto con transparencia y la administración pública diáfana fueron promesas que nunca se realizaron. Pero por eso votó la gente. Cuando los ciudadanos de Maynas elegimos a Charles Zevallos Eyzaguirre tampoco fue necesario debate alguno. Y Charles antes de acudir a debates se la pasaba repartiendo besos no sólo en Maynas sino que sus piquitos llegaban hasta Nauta. Prometió 18 kilómetros de pista y manejo responsable del gasto público. Y lo que hizo fue no sólo malgastar el dinero de los contribuyentes sino banalizar el cargo. Será siempre una incógnita y un trabajo pendiente de los investigadores urdir sobre las motivaciones que llevaron a los electores de esta provincia a darle el 28.8 por ciento de los votos, que tampoco fue una mayoría abrumadora como presagiaban las encuestas y repetía el candidato naranja.
En la región Loreto el candidato Iván Vásquez Valera el 2006 no tuvo en un debate la causa determinante para obtener el 40.9 por ciento de los votos. Le bastó con recorrer nuevamente los pueblos de la región para recordar al electorado que iba a mejorar la Educación, Salud y Nutrición. Igual sucedió el 2010 cuando más que participar en debates lo que Vásquez Valera hizo fue planteamientos audaces y populares que le llevaron a ganar en primera vuelta con el 31.5 por ciento de los votos. Como aquello de techo digno y la promesa de cumplir su mandato entregando calaminas para 60 mil viviendas. Ya ha entregado cerca de 50 mil, según las estadísticas. Pero en ambas elecciones ni el debate fue determinante ni los electores decidieron su voto en base a programas. ¿Alguna vez el poblador vota por programas? es la pregunta que nunca terminaré de formularme y talvez nunca terminaré de responderme.
A todo ello hay que añadir que hace por lo menos un lustro los candidatos debaten públicamente a través de los medios de comunicación. Lo hacen directamente o a través de quienes contratan bajo el rótulo de concesionarios. Es un debate muchas veces bucólico, es verdad. Pero debate al fin. Claro que en esta oportunidad a varios de ellos –me refiero a los candidatos- se los pasó la mano y la billetera. Porque tienen como voceros a impresentables que apenas balbucean términos y tienen como coherencia precisamente la irracionalidad que, aunque suene paradójico, es una característica que muestran con facilidad. En Iquitos, como en el resto de Loreto, se producen debates cotidianos y en ellos se muestra lo que son los candidatos.
Que es necesario un debate como el convocado por la UCP, claro que es necesario. El mismo hecho que lo convoque una institución académica ya es un avance porque son ellas las que deben intervenir de esta forma en las elecciones. De esta forma irán excluyendo de la agenda a los ignorantes que se han metido arbitrariamente a hablar en nombre de la opinión pública y llevarán la discusión a las aulas. Una cosa es considerar que los debates no son determinantes y que los electores no voten por propuestas y otra, muy distinta, oponerse a la realización de los mismos y a la exposición de ellas.
En la región Loreto el candidato Iván Vásquez Valera el 2006 no tuvo en un debate la causa determinante para obtener el 40.9 por ciento de los votos. Le bastó con recorrer nuevamente los pueblos de la región para recordar al electorado que iba a mejorar la Educación, Salud y Nutrición. Igual sucedió el 2010 cuando más que participar en debates lo que Vásquez Valera hizo fue planteamientos audaces y populares que le llevaron a ganar en primera vuelta con el 31.5 por ciento de los votos. Como aquello de techo digno y la promesa de cumplir su mandato entregando calaminas para 60 mil viviendas. Ya ha entregado cerca de 50 mil, según las estadísticas. Pero en ambas elecciones ni el debate fue determinante ni los electores decidieron su voto en base a programas. ¿Alguna vez el poblador vota por programas? es la pregunta que nunca terminaré de formularme y talvez nunca terminaré de responderme.
31.5% DEL ELECTORADO; O SEA 3 DE CADA 10 PERSONAS; ESO SE LLAMA LEGALIDAD PERO NO LEGITIMIDAD QUERIDO CONTRATISTA DEL GOREL. YA CUMPLIÓ CON MÁS DE 50 ML TECHOS DIGNOS?, USTED SE LA CREE? SEGURO QUE SÍ, PUES DE ALGUNA MANERA AHÍ TENDRÁ NEGOCIOS QUE HACER CON SU PRESIDENTE.
NO NOS META FLORIPONDIO COMO DICEN EN JERINGA LOS QUE TIENEN CAYETANO HEREDIA………………….SR. CONTRATISTA
Lamentablemente no hay seriedad ni en lospoliticos ni imparcialidad en los organizadores; por ejemplo el Señor Vasquez Valera, que Michi ha echo en estos ultimos siete (07) años de Gobierno, muy aparte de hacerse Millonario el y sus Hermanos mayores, claro y el Director de este Pasquin Jaime Vasquez Valcarcel, nada ps. sus promesas de las dos (02) campañas incumplidas, su famos alcantarillado no hay cuando funcione y nos tiene como muchachos etecos. este ya esta obnubilado de Poder. el 05 de octubre castiguemos a esta pesima autoridad Regional.
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