Esa es la pregunta que todos nos hacemos, porque justicia célebre es lo que menos tenemos y la demora de los procesos judiciales es pan de cada día en nuestro sistema de justicia.
El informe que hace Gaceta Jurídica, dice: los jueces se toman un mes para calificar una demanda. En promedio, transcurren treinta días desde la fecha de la presentación de la demanda que se expide el auto admisorio o de inadmisibilidad. Así lo constata el informe sobre la base de la propia información del Sistema de Consulta de Expedientes Judiciales del Poder Judicial.
De esta manera se puede señalar que para calificar una demanda los jueces necesitan quince veces más que el tiempo previsto en el artículo 153 del texto único de la Ley Orgánica del Poder Judicial (que señala 48 horas)
Y no era para menos teniendo en cuenta que durante el año pasado, como recuerda el informe, el Poder Judicial registró una carga procesal de 3’046,292 expedientes. De estos, 2’145, 450 se encontraban en trámite, mientras que 900,887 estaban en ejecución. Lo que quiere decir que el futuro no es alentador.
En el 2014, los órganos jurisdiccionales del Poder Judicial solo pudieron resolver 1´180, 911 expedientes. Si esta cifra es comparada con la carga procesal del año que son de 3’046, 282 expedientes, tenemos que el 61% de los expedientes tramitados se quedaron sin resolver igual a 1’865,381. (Wilber Gil)