Werner Herzog, cineasta alemán, estuvo en la década del 80 del siglo pasado en Iquitos y sus alrededores. No sólo por su origen sino por su formación, Herzog, tenía en la Amazonía un lugar propicio para filmar sus películas. Necesitamos más alemanes, más locos de amor por la Amazonía, no sólo en cine sino en todos los campos. El mundo sería mejor en manos de locos, la cordura no ha servido para mucho.Werner Herzog, cineasta alemán, estuvo en la década del 80 del siglo pasado en Iquitos y sus alrededores. No sólo por su origen sino por su formación, Herzog, tenía en la Amazonía un lugar propicio para filmar sus películas. Necesitamos más alemanes, más locos de amor por la Amazonía, no sólo en cine sino en todos los campos. El mundo sería mejor en manos de locos, la cordura no ha servido para mucho.