La familia Boullosa se reunió en torno a la húmisha. Y los amigos también se juntaron para echarse de todo y colorear el rostro de los que se dejaban y de los que no también. Con un almuerzo especial y bebidas bien variadas se pasó una divertida tarde que fue el preámbulo de la celebración central. Un buen grupito para la pandillada y el canto en torno a una fiesta tradicional de la selva.